El libio condenado a prisión por el atentado de 1988 en Lockerbie, que sufre una enfermedad terminal, fue trasladado a urgencias en un hospital de Trípoli, informó el miércoles una fuente oficial libia a Reuters.

Abdel Baset al Megrahi, que sufre cáncer de próstata, fue liberado de una cárcel en Escocia el mes pasado porque la justicia decidió que no le quedaba mucho tiempo de vida. Estados Unidos y los partidos de la oposición de Reino Unido han criticado la medida.

"Fue ingresado en urgencias en el hospital. Está mal. No puede hablar con nadie", dijo el alto cargo libio, hablando bajo condición de permanecer en el anonimato.

No había más información sobre el estado de Megrahi. Un portavoz del Centro Médico de Trípoli, el hospital en la capital libia donde Megrahi está siendo tratado desde hace días, dijo que el paciente estaba demasiado débil para hablar con los periodistas.

"Debido al tratamiento que está recibiendo, su sistema inmune es muy débil y no puede hablar con nadie hoy", dijo Omar Senoussi, jefe de relaciones con los medios en el hospital.

Megrahi fue la única persona condenada por la explosión del vuelo 103 de Pan Am cuando sobrevolaba la población escocesa de Lockerbie. Fallecieron 270 personas. El ciudadano libio recibió una gran bienvenida cuando llegó a Libia el mes pasado.

El presidente estadounidense, Barack Obama, dijo que la liberación de Megrahi, un ex agente de inteligencia libio, era un error. La mayoría de los fallecidos del atentado eran ciudadanos estadounidenses.

El Gobierno británico también ha sido acusado por sus oponentes políticos de apoyar la liberación de Megrahi para mejorar las relaciones con Libia, donde las compañías británicas buscan un mayor acceso a las reservas de gas y petróleo del país norteafricano.

El primer ministro británico, Gordon Brown, rechazó el miércoles las acusaciones, y dijo que la decisión de liberar al libio fue tomada por el Gobierno de Escocia y Londres no ejerció presión.