Los socialistas parecen decididos a meter el riñón para movilizar a su electorado con la expectativa de un triunfo al alcance de la mano. En el ecuador de la campaña, más allá del reparto concreto de escaños, las encuestas que maneja el PSE detectan un crecimiento sostenido en el porcentaje de ciudadanos que se declaran a favor del cambio y que se aproxima ya al 60%.

'Ya no basta con ganar. Hay que ganar con margen, porque nos lo pondrán difícil. Necesitamos un poco más de apoyo, un poco más de impulso y de energía', dijo por la mañana, para acentuar esa expectativa movilizadora, el alcalde de San Sebastián, Odon Elorza.

Patxi López vuelve a pedir el voto a los nacionalistas hartos de Ibarretxe

A dar ese impulso acudió por la tarde José Luis Rodríguez Zapatero, para quien el red bull electoral está en los jóvenes cuando de lo que se trata, como en Euskadi, es de producir un cambio. Así ocurrió en 2004, cuando él accedió a la Presidencia del Gobierno, y así ha pasado de forma más reciente en EEUU con Barack Obama, según recordó el candidato a lehendakari, Patxi López.

El PSE es el primer partido en las preferencias del electorado joven, pero su intención declarada de participar en las urnas está quince puntos por debajo de la media. Por eso, Zapatero y López, López y Zapatero, los animaron con insistencia a ser 'el motor del cambio' y a 'hacer historia'.

El presidente del Gobierno y el candidato a lehendakari protagonizaron una reunión con formato de cuadrilátero con miembros de las Juventudes Socialistas, a los que hablaron de pie y con micrófonos de solapa. 'Si la mayoría de los jóvenes y de las mujeres no hubieran votado en 2004, seguiríamos en Irak y seríamos los últimos en seguir aplaudiendo a Bush', les dijo Zapatero, evocando la que fue una de las claves de su primera victoria electoral.

Odon Elorza: 'Hay que ganar con margen, porque nos lo pondrán difícil'

Zapatero introdujo también una dosis de recuerdo del proceso de negociación con ETA, que está en el fundamento del despegue electoral del PSE, aunque López no haga ninguna referencia en la campaña. 'No hemos llegado a la meta, pero hemos avanzado mucho, y tengo el convencimiento de que con Patxi de lehendakari avanzaremos mucho más. Los de mi generación tenemos un compromiso moral, un deber, para que vuestra generación reciba la paz, como la nuestra recibió la Constitución', afirmó el líder del PSOE, en otro guiño al electorado más joven.

Otro plan: para los jóvenes

También sacó a relucir, en la búsqueda de esa complicidad, el otro gran debate sobre el que se ha tendido un manto de olvido en esta campaña: el plan soberanista de Ibarretxe. 'Han sido muchas horas hablando con Ibarretxe y siempre me contaba su plan: el uno, el dos, el tres... Me hablaba siempre de su plan, pero de los planes de los jóvenes no me habló nunca', subrayó. Él se comprometió a hacer uno especial de vivienda para acelerar su emancipación.

Y, como tercera idea, insistió: 'Tengo muchas ganas de que gane Patxi para ver a un lehendakari de izquierdas'.

En esta recta final de la campaña, López vuelve a pedir el apoyo a todos los que alguna vez han votado al PSE, con la esperanza de que 'ahora sí es posible' el cambio; y a 'los que, aun siendo nacionalistas', quieren pasar la página de la división entre vascos.