Hoy finaliza el periodo de detención preventiva que las autoridades de Chad prorrogaron el sábado para los siete españoles detenidos en el país africano. Si no se presentan cargos en su contra, los españoles, miembros de la tripulación del avión que fletó una ONG francesa para sacar de Chad a 103 niños, deberían quedar en libertad. Pero el presidente del país, Idriss Deby, les acusa de pedofilia. Ayer, detuvieron al piloto belga
que trasladó a los menores desde la frontera de Sudán a la capital de Chad.

“Es un activista de una organización pedófila. Usted se atendrá, español o no, a la pena que merece”. Así se dirigió Deby a un miembro del grupo español detenido. Éste le había intentado explicar previamente que son miembros de “una compañía española que ha sido contratada para un vuelo chárter”, y que no saben “más”.

El encontronazo, que se produjo el viernes pasado, lo emitieron ayer las televisiones españolas. Muestran la visita del presidente al centro de Abéché (Chad) donde los españoles y los nueve franceses, miembros de la ONG Arca de Zoé, permanecen detenidos. También allí estan los 103 niños que iban a ser trasladados a Francia.

El cónsul español en Camerún, Vicente Mas, ya está en Chad para interceder por ellos. El Ministerio españolde Asuntos Exteriores afirmó que las gestiones son lentasy que los detenidos están bien de salud y no se les hamaltratado.

Las autoridades españolas colaboran con las francesas. Aunque el Gobierno galo ha expresado su convicción de que la operación que pretendía llevar a cabo la ONG es ilegal, ha dicho también que ayudará a los detenidos. El ministro francés de Exteriores, telefoneó al presidente de Chad para mostrarle su solidaridad y anunció que ha creado una célula de crisis.