«¿Qué me va usted a contar, señorita?». Esa frase que pronuncia Isabelita ―interpretada por Julieta Serrano― al final de la película del cineasta Jaime de Armiñán ha quedado grabada para siempre en la memoria cinematográfica colectiva. Corría el año 1972, una época en la que la homosexualidad y la transexualidad eran todavía consideradas un delito que se castigaba en aplicación de la ley de peligrosidad y rehabilitación social, cuando el director llevó a la gran pantalla la historia de una persona en busca de su identidad de género. En aquella película Antonio Ferrandis cogía amorosamente la mano de José Luis López Vázquez, caracterizado como mujer y la gran novedad era que, por primera vez en mucho tiempo, esa escena no pretendía sacar una carcajada a los espectadores, sino todo lo contrario.
El efecto fue multiplicador porque el gran público venía de seguir al cómico a lo largo de una amplia trayectoria de títulos histriónicos como El turismo es un gran invento, que favorece todos los tópicos sexistas de la época, y encontrarlo de pronto ataviado con una mantilla o las batas de una señora de provincias en una cinta tan sutil como sobria, a buen seguro hizo que le volase la cabeza a más de uno. La Academia de Cine supo valorar la osadía de buscar una fórmula para no renunciar a la importancia del relato y sortear a la censura en los últimos coletazos de la dictatura, de manera que escogieron a Mi querida señorita para representar a España en los Oscar de 1973. No solo eso. La película consiguió llevar a las salas a casi dos millones de personas y, aunque perdió la carrera hacia la estatuilla dorada a la mejor película de habla no inglesa frente al El discreto encanto de la burguesía de Luis Buñuel, alcanzó niveles de fascinación en Hollywood.
La historia tenía una cuenta pendiente con Armiñán y Mi querida señorita que este 2024 será saldada por Los Javis. «Nosotros llevamos tiempo queriendo de visitar algún clásico. Creo que en nuestro cine y literatura hay historias increíbles, pero no estamos tan acostumbrados adaptarlas, como ha hecho Greta Gerwig con Mujercitas, y convertirlas en algo actual», avanzó Javier Calvo durante la presentación de la nueva temporada de estrenos en Netflix. «No va a ser un remake», advirtió Javier Ambrossi. «Es una adaptación; los tiempos han cambiado, y creemos que es un buen momento para revisitar esta historia, una historia de identidad de género y de amor maravillosa y mainstream. El reto creativo es hasta dónde se puede actualizar sin perder la esencia», amplió ante la prensa congregada.
De momento, han trascendido pocos detalles sobre el proyecto. Calvo y Ambrossi serán los productores de esta cinta, pero aún se desconoce quién retomará el guion de Jaime de Arimañán y José Luis Borau, cuáles son los nuevos protagonistas o el director. «Solo podemos adelantaros que es gente con mucho talento», ha dejado en suspenso Calvo.
Solo dos días antes de que desvelaran este proyecto, los presentadores de la próxima gala de los Premios Goya recibieron a Público en la Academia de Cine y dejaron algunas pistas de esta nueva etapa, después de arrasar en los Premios Feroz con la serie La Mesías. «Nos han llamado para trabajar en Estados Unidos, pasa con cualquier director que hace algo que gusta allí y Veneno fue muy bien, pero Pedro [Almodóvar] nos dijo una cosa: ‘Todavía os quedan muchas cosas que investigar por aquí, de vuestra cultura, y de trabajar con actores que hablen tu idioma’. Es tentador trabajar allí, pero también nos gusta mucho nuestro país», deslizaba Calvo en aquella conversación en la que también se extendieron a temas como la censura, que es una de las claves que han hecho que se decidieran por regresar al cine con Mi querida señorita.
«Una de las mejores cosas de la película original es que, probablemente por la censura de la época resuelven el tema de la identidad de género con una elipsis. (…) Nadie explica el cambio que hace el personaje protagonista y creo que esta es una oportunidad para rellenar los huecos», explica Ambrossi. «Ya hemos llegado todos a la conclusión de que se necesita una reflexión y profundizar sobre la transexualidad, pero además podemos hacer todo eso en una peli súper entretenida, muy romántica y que puede llegar a todo el mundo, sin dejar de ser pedagógica», amplió lleno de entusiasmo.
En esta edición de los Goya, que se celebrará dentro de una semana, ya hay proyectos que andan por esa senda. Entre ellos adquiere especial relevancia Te estoy amando locamente, la película con la que debutó como director Alejandro Marín, que opta a cinco estatuillas, entre las que están la de mejor actor revelación para La Dani. Esta cinta cuenta cómo surge el movimiento LGTBI en Andalucía al abrigo de la Iglesia Católica, aunque el alma de la historia es la relación entre una madre y su hijo. «Son proyectos súper modernos e importantes», señaló Ambrossi. «Lo más interesante de Mi querida señorita es que fue pionera y dio visibilidad a una letra de colectivo LGTBI que no se toca. Traerla con lo que tenemos ahora es necesario para nuestro colectivo», remarcó.
‘Superestar’ o los años de la televisión salvaje
Mariano Barroso, director de contenido de películas de Netflix para España y Portugal, fue el encargado de presentar a esta pareja de cineastas y desvelar el gran secreto de la nueva temporada en la plataforma de streaming. Lo hizo con una frase definitoria: «Estos no saben lo que es el miedo».
En efecto, Ambrossi y Calvo se atreven con todo. Este 2024 ha arrancado con fuerza y llegan a Netflix con un doblete como productores. El segundo proyecto que se anunció este pasado 1 de febrero fue Superestar, la nueva serie creada por Nacho Vigalondo que girará en torno a los comienzos artísticos de la cantante Yurena ―conocida anteriormente como Tamara―. Ingrid García-Jonsson interpreta a la protagonista, Natalia de Molina a Loly Álvarez, Secun de la Rosa a Leonardo Dantés, Pepón Nieto a Tony Genil, Carlos Areces a Paco Porras, Julián Villagrán a Arlekin y Rocío Ibáñez se pone en la piel de Margarita Seisdedos, la madre de Tamara.
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«El proyecto representa la televisión como arma de doble filo, el triunfo de los antihéroes», ha resumido Ambrossi, pero detrás del impresionante trabajo de caracterización que se adivina tras la publicación del cartel promocional, hay mucho más como en cualquiera de sus proyectos. «Ellos representa el triunfo de los outcast, el eclipse de una época en la que de repente un grupo de personas que no estaban llamadas a ser famosas llegaron a ser número uno. Puedes verlo como un fallo del sistema, pero la gente que en principio los miraban por encima del hombro vio cómo se convertían en estrellas», cuenta. Esta pandilla que se convirtió en el corazón del contenido de Crónicas Marcianas inventó, sin saberlo, el concepto del main character que ahora abandera la generación Zeta.
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«Nos apetecía hacer algo salvaje, loco, porque fue una era de cambio en España. No había reglas, se podía hacer todo en la televisión«, especifica Calvo. «En Suma Content, nuestra productora, hay mucha gente joven y muchos no conocían el tamarismo. Flipan con que un coche acabase estampado en La Cibeles o con que su madre llevase un ladrillo en el bolso, pero todo eso pasó de verdad. Ese relato de la cultura pop va a acercar mucho a las nuevas generaciones y les descubrirá lo que era España antes de las redes, porque estos personajes fueron uno de los primeros personajes virales», reivindica.
Hay una baronesa en la sala
La cita con los medios estuvo repleta de sorpresas, incluida la recepción por parte de todo el equipo de Sálvame con Belén Esteban, que fue la encargada de recoger los abrigos de los periodistas y Terelu Campos, a cargo del merchandising. Ambas no perdieron la ocasión para recordar a los presentes que justo ayer se estrenó en la plataforma la segunda parte de Sálvese quien pueda. Los colaboradores siguen su búsqueda de trabajo en otros tres capítulos del docureality que los lleva hasta México en esta ocasión.
Este no es el único título que se ha desvelado esta semana. El pasado lunes Netflix avanzó un tráiler en el que demostró que sigue apostando por creadores españoles como Carlos Montero (Respira), Laura y Alberto Caballero (Machos Alfa, temporada 2), Oriol Paulo (La última noche en Tremor), Álex de la Iglesia (1992), Daniel Calparsoro (Asalto al Banco Central) o Lluís Quílez (Mano de hierro). También volveremos a ver a caras conocidas como la de Georgina Rodríguez y se sumarán otros protagonistas patrios tan interesantes como Dabiz Muñoz, uno de los mejores chefs del mundo.
Los periodistas convocados conocieron detalles de estos proyectos que en su mayoría han sido rodados en nuestro país, pero como se diría en el argot judicial, los pormenores siguen bajo secreto de sumario. A cambio, la plataforma regaló a los presentes un avance en el apartado de contenidos de no ficción que incluyó una visita aristocrática. Tita Cervera irrumpió en la sala acompaña de un séquito de asistentes para descubrir que será la protagonista de una docuserie que viene de la mano de Komodo Studio (creadores de Soy Georgina). «Es el momento de contar mi vida desde el principio», sentenció.
Aitana se asoma al cine
Cuando se estrenó, La última, el debut como actriz de Aitana Ocaña en Disney+, la cantante ya dejó caer que tenía preparado algo más grande como intérprete. De aquello ha pasado ya un año y ahora conocemos los pormenores del proyecto. Pared con pared es una comedia romántica que empezó a rodarse en mayo de 2022 y que se estrenará este 2024. Se trata de un remake de la francesa Un peu, beaucoup, aveuglément! —Tras la Pared—, que cuenta cómo una vecina pianista y un inventor de puzles se enamoran. Hasta ahí podemos leer.
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La triunfita no estará sola en esta aventura. Su partenaire será Fernando Guallar, un actor que tiene en su filmografía películas como Gente que viene y bah o La Ternura. El reparto se completa con Paco Tous (Los Hombres de Paco y La Casa de Papel), Adam Jecierski (Física o Química y Vota Juan), Miguel Ángel Muñoz (Al Salir de clase y Un paso adelante) y Natalia Rodríguez (Mía es la venganza).