Este artículo se publicó hace 4 años.
OkdiarioEl Gobierno autoproclamado de Bolivia utiliza a 'Okdiario' para señalar a los observadores internaciones enviados por Unidas Podemos
La versión publicada por el digital de Eduardo Inda, en la que los enviados habrían aterrizado en la capital del país alegando "turismo", ha sido desmentida por los propios observadores, que han facilitado a 'Público' sus carnets, expedidos por el Tribunal Supremo Electoral de Bolivia.
Jose Carmona
Madrid-Actualizado a
El actual Gobierno de Bolivia, presidido por Jeanine Áñez, autoproclamada presidenta tras el golpe de Estado contra Evo Morales el 10 de noviembre de 2019, mantiene una posición beligerante contra los observadores internacionales que acuden al país para garantizar un proceso electoral limpio este domingo, día en el que el pueblo está llamado a las urnas después de un turbulento ciclo que comenzó hace casi un año con la salida forzada de Morales tras la amenaza televisada de Williams Kaliman, jefe del Ejército del país.
Observadores de todo el mundo y de todo el espectro político e ideológico se han dado cita en La Paz para ser testigos de que las elecciones transcurren de manera pacífica y de que el proceso no es intoxicado por ninguna de las partes. Sin embargo, el actual Ejecutivo ha decidido apuntar contra estos emisarios. Prueba de ello es que el Gobierno argentino ha advertido durante la madrugada de este sábado sobre la detención de uno de sus delegados.
Estas denuncias en torno al trato y a la seguridad de los observadores han tenido su eco en España, cuando la web de Eduardo Inda Okdiario filtraba las imágenes de los observadores internacionales relacionados con Unidas Podemos y aseguraba que habían entrado en el país alegando razones de "turismo".
Pisarello: "Estamos acreditados por el Tribunal Supremo Electoral"
Gerardo Pisarello, diputado de Unidas Podemos y uno de los enviados, desmiente esa versión de los hechos: "Dije de manera clara que veníamos de observadores internacionales y no me pusieron ningún problema. Además, estamos acreditados por el Tribunal Supremo Electoral (TSE). Si las cosas fueran como sugiere Okdiario no podríamos tener nuestras acreditaciones", asegura el secretario primero del Congreso de los Diputados, que además ha mostrado a Público el documento expedido por el TSE, que da prueba del motivo de su viaje.
Otra información publicada en la web de Eduardo Inda aseguraba que los enviados españoles se alojan en uno de los hoteles más caros de Bolivia, el Hotel Europa. Fran Pérez, responsable de política internacional de Izquierda Unida y también desplazado a Bolivia como observador, rechaza esa lectura de los hechos: "Hemos venido a este hotel porque es donde el TSE da los cursos y están instalados un grupo de sus dirigentes. Además, es donde se alojan todos los observadores internacionales", asegura. El precio de la habitación ronda los 70 dólares por noche, aseguran los emisarios españoles a Público. "Hemos venido con la exclusiva intención de ayudar en un proceso electoral muy polarizado, donde queremos aportar objetividad que pueda ayudar a un proceso de transparencia. Sin observadores, no habría garantías, por eso hemos venido", apostilla Pérez.
Pérez: "Hemos venido a este hotel porque es donde el TSE da los cursos y están instalados una grupo de sus dirigentes"
Pisarello encuentra consecuencias peligrosas en la filtración de sus fotografías: "El peligro añadido es que esas noticias de Okdiario no se están quedando ahí, sino que están pasando a medios bolivianos, grupos de Whatsapp de vecinos de La Paz e incluso a la propia televisión, donde, con estas imágenes, se nos intenta presentar no como observadores para garantizar elecciones limpias, sino como peligrosos y alborotadores que podrían generar violencia. De esta forma, se justifican actuaciones como la que vimos con el grupo de diputados argentinos que fueron detenidos en la frontera y sufrieron maltratos. Es una situación enormemente preocupante. Si hacen esto con observadores, no queremos imaginar lo que están haciendo con la oposición", comenta preocupado el diputado.
Cuestión aparte es la del verdadero origen de las fotografías de los cuatro observadores españoles. Las instantáneas fueron tomadas por las máquinas del control de fronteras, por lo que su divulgación podría suponer un delito: "Tendrían que explicar por qué tienen acceso a las fotos que hace la Policía boliviana a la gente que pasa fronteras. Tendrían que explicar cómo han accedido a eso", propone Pérez, que acude junto a otros delegados del Partido de la Izquierda Europea (PIE)
'Okdiario', un facilitador del Gobierno autoproclamado
Que en España se informe sobre una entrada controvertida de emisarios españoles tiene consecuencias a nivel interno en Bolivia, donde reina una calma tensa a pocas horas de las elecciones. A ojos de Pisarello, que Okdiario informe de su entrada en Bolivia tiene como objetivo dar salida a informaciones que el Gobierno de Bolivia quiere tener circulando por la red, para así intoxicar el ambiente y que los medios locales puedan hacerse eco de lo publicado.
"Hay un vínculo entre el Gobierno, la Policía y Okdiario, porque las imágenes que se publicaron provienen de Migraciones y tienen que haber sido cedidas, lo cual es absolutamente ilegal. Los mensajes intimidatorios no provienen de ningún partido, son del propio Gobierno, que tiene un temor muy grande de perder estas elecciones y que haya un gobierno que reconozca las irregularidades que se han cometido. Incluso uno de los opositores más acérrimos de Morales, Luis Fernando Camacho, está siendo muy crítico con el Gobierno. Y el candidato que está situado en segundo lugar –las encuestas dan como favorito a Luis Arce, candidato de MAS, el partido de Evo Morales–, Carlos Mesa, también tiene interés en que los resultados que se produzcan tengan una mínima fiabilidad", señala Pisarello.
Pisarello: "Hay un vínculo entre el Gobierno, la Policía y Okdiario"
Por su parte, el observador de Izquierda Unida Fran Pérez, se muestra crítico por buscar enemistades en los agentes internacionales: "Lo que no hay derecho es a desacreditar a quienes participan en misiones de observación. La ideología de los observadores es plural. Aquí están de observadores del Partido de la Izquierda Europea, pero también la Fundación Carter. Están acreditados y tienen derecho a venir. Está Naciones Unidas como observador. ¿A qué viene esta campaña contra cuatro españoles, cuando aquí hay grupos paramilitares que siguen existiendo vinculados a la ultraderecha? Poco menos que se plantea que venimos a desestabilizar", arguye.
Los resultados del domingo
Con el foco y la presión puesta sobre los observadores internacionales, este domingo Bolivia volverá a votar, con el partido de Evo Morales como favorito para esta primera vuelta. "El Gobierno de facto está más desprestigiado que nunca, y tiene la fuerza como para dificultar el regreso a la normalidad. Su grado de desprestigio internacional y nacional es enorme", apunta Pisarello.
"Esto es un pequeño laboratorio para EEUU, porque el propio Trump no deja entrever si reconocerá resultados adversos"
Sobre el riesgo de que algún partido o incluso el actual Ejecutivo se adelante a los resultados fiables –que tardarán al menos una semana en tener credibilidad– y se autoproclame vencedor, el diputado de Unidas Podemos no puede negar el riesgo a que eso ocurra: "Me gustaría poder responder de manera negativa, pero no puedo hacerlo. A la vista de cómo han actuado en redes sociales, el domingo pueden pasar muchas cosas. Hay fake news impulsadas por la extrema derecha que dudo que desparezcan el domingo. Las elecciones bolivianas son el ensayo de lo que está en juego: que países controlados con políticas autoritarias reconozcan resultados adversos. Esto es un pequeño laboratorio para EEUU, porque el propio Trump no deja entrever si reconocerá resultados adversos".
Fran Pérez, por su parte, detecta grandes dosis de miedo, a pocas horas de que Bolivia haga por recuperar la normalidad que se le arrebató el pasado noviembre: "Detecto que el pueblo boliviano tiene ganas de votar, pero al mismo tiempo hay miedo a lo que pueda ocurrir, visto el año pasado, cuando se quemaron dos centros regionales de recogidas de actas. La gente tiene miedo a que haya violencia por parte del Estado o grupos paramilitares en el caso de que el propio resultado no gustara al Gobierno. Es un país muy polarizado, hay dos proyectos muy enfrentados, uno al servicio de la oligarquía y otro al servicio del pueblo. Hay un clima de calma tensa".
* A la publicación de esta noticia, Público no ha podido contactar con la Embajada de Bolivia ni con el Consulado en España.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.