El Congreso aprueba el decreto para revalorizar las pensiones y aplicar rebajas al transporte público
El Congreso da luz verde, definitivamente, al paquete de medidas que tumbaron el PP y los de Puigdemont a mediados de enero.
El decreto se ha vuelto a votar este miércoles en la Cámara Baja después de el Gobierno lograra desatascarlo pactando con Junts permitir la tramitación de la PNL sobre la cuestión de confianza.
Madrid--Actualizado a
A la segunda ha ido a la vencida. El Congreso de los Diputados ha convalidado, este miércoles, una parte del decreto ómnibus que decayó en enero torpedeado por Partido Popular y Junts per Catalunya. Se trata de un paquete que lleva varias medidas del escudo social y que, finalmente, el Ejecutivo logró desatascar gracias a acordar con los posconvergentes tramitar su PNL sobre una cuestión de confianza a Pedro Sánchez.
Una vez se alcanzó ese entendimiento, el Gobierno aprobó en Consejo de Ministros el decreto para volver a llevarlo al Congreso ―lo que ha ocurrido este miércoles―, donde, a diferencia de lo que pasó la primera vez, sí que ha logrado una mayoría suficiente para quedar definitivamente aprobado.
¿Qué lleva el decreto?
Entre otras cosas, el decreto lleva la revalorización de las pensiones, la prórroga de las ayudas al transporte ―esas dos son medidas que, al decaer, provocaron un gran descontento social―, la moratoria contra los desahucios a las familias vulnerables sin alternativa habitacional o las ayudas a los afectados por la DANA o el volcán de La Palma.
Más al detalle, el decreto contiene la subida del 2,8% de las pensiones contributivas para este año. Las ayudas al transporte público contemplan una rebaja de, al menos, el 50% del precio de los abonos y los títulos de multiviaje tanto en el transporte público colectivo urbano, como en el interurbano.
El palacete del PNV
Otra cuestión que trajo cola en enero fue la transferencia de un palacete en París (Francia) al Partido Nacionalista Vasco (PNV). El PP criticó duramente al Gobierno e insinuó que estaba "comprando" los votos de los jeltzales con esa cesión. A su vez, criticó a los de Aitor Esteban por "dejarse comprar".
En todo caso, el Ejecutivo ha calificado la cesión del palacete, que fue sede del Gobierno vasco durante los años de exilio, de "un hecho de justicia histórica" que debería aplaudir cualquier figura política que se considere "demócrata".
Con todo, Pedro Sánchez cierra una carpeta compleja, aunque a cambio de lo que seguramente será un mal trago para él y para su Gobierno. El Congreso ya admitió a trámite la PNL de Junts sobre una cuestión de confianza y, en estos momentos, la duda es cuándo se incluirá el orden del día de algún Pleno. Cabe la posibilidad, incluso, de que eso no llegue a ocurrir si socialistas y posconvergentes encauzan en alguna medida sus relaciones, algo que verdaderamente parece muy lejos de ocurrir.
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