La ILP antitaurina cae por la abstención sorpresa del PSOE y los votos en contra de PP y Vox
La iniciativa legislativa popular (ILP) buscaba que las corridas de toros dejaran de ser patrimonio cultural para que las distintas regiones del Estado pudieran decidir si prohibirlas.

Madrid--Actualizado a
Sorpresa mayúscula. La iniciativa legislativa popular (ILP) para que las corridas de toros dejaran de ser patrimonio cultural español y, así, perdieran el blindaje constitucional que tienen actualmente se queda a las puertas del Congreso. El PSOE se ha abstenido, a pesar de haber emitido las señales opuestas en las últimas semanas. Su abstención contra todo pronóstico, junto con los votos en contra de PP, Vox y UPN, han tumbado una iniciativa que se registró en la cámara con 664.777 firmas.
Era una de las pocas iniciativas de la semana que parecía destinada a prosperar. Al fin y al cabo, lo que se ha debatido y votado este miércoles ha sido la admisión a trámite de la misma, es decir, la posibilidad de que se trabaje en la Cámara Baja. Además, el PSOE había allanado el terreno para permitir su tramitación. Pero no lo ha hecho. El socio mayoritario del Gobierno ha optado finalmente por abstenerse, contra el criterio de todos sus aliados, a sabiendas de que su abstención junto con los votos en contra de PP, Vox y UPN darían al traste con la reforma legislativa.
Lo que perseguía la ILP no era la abolición de la tauromaquia —aunque quienes la promovían son activistas antitaurinas—, sino devolver a las comunidades autónomas las competencias que perdieron en 2013 para decidir qué tratamiento dar a la tauromaquia: también si prohibirla.
Fue en 2013 cuando otra ILP, impulsada en este caso durante el segundo gobierno de Mariano Rajoy, modificó la Constitución para convertir la tauromaquia en patrimonio cultural, algo que no es trivial. La ley que emanó de aquella ILP especifica que "los poderes públicos garantizarán la conservación de la tauromaquia y promoverán su enriquecimiento, de acuerdo con lo previsto en el artículo 46 de la Constitución". Es un precepto de la Carta Magna que especifica que "la ley penal sancionará los atentados contra este patrimonio". De modo que, desde 2013, va contra la ley que una región decida no proteger los toros o prohibirlos.
Y, tras lo ocurrido este martes por la noche en el Congreso, así seguirá siendo. Los promotores de la iniciativa, conglomerados en la plataforma No es mi cultura, que alberga a más de 200 asociaciones, confiaban en que el PSOE pusiera en valor que el objetivo de la reforma era devolver competencias a las comunidades autónomas. Sin embargo, el gran debate que genera la tauromaquia dentro del partido ha terminado decantando la balanza hacia una abstención que, en la práctica, se traduce en un misil que ha fulminado la ILP antes incluso de haber empezado su tramitación en la Cámara Baja.
En Sumar ha molestado mucho el giro socialista. "El PSOE, este martes, no ha escuchado a las más de 660.000 personas que han apoyado una ILP que defiende que la tauromaquia no es cultura", han trasladado fuentes del partido una vez ha terminado la votación. Y han completado: "Lo ocurrido en el Pleno evidencia que se han unido al Partido Popular y Vox en una medida que hace avanzar a España en algo tan básico como la defensa de los derechos de los animales ante la tortura".
Por otro lado, subrayan que la ILP "cuenta con el apoyo del Ministerio de Cultura que lidera Ernest Urtasun, quién ya inició el camino de acabar con la tortura animal en la cultura retirando el dinero público que se daba a las entidades que promueven la tauromaquia y eliminando el Premio Nacional".
También Ione Belarra, líder de Podemos, se ha pronunciado tras el cambio inesperado del PSOE. "Me parece indignante lo que ha hecho el PSOE, que se había comprometido a votar que sí. Es lamentable. Desde aquí le dejamos muy claro al PSOE que vamos a seguir trabajando hasta que la tauromaquia se elimine para siempre, porque la cultura no es mi tortura", ha dicho a través de la red social X, antes Twitter.
En cualquier caso, con la derrota parlamentaria de este martes, la ILP ha decaído y cualquier intento para reformar la ley que blinda las corridas de toros en la Constitución tendrá que pasar o bien por una nueva ILP, con el ingente trabajo de la ciudadanía que ello implica (es necesario recoger medio millón de firmas), o por una propuesta que llegue de parte de algún grupo parlamentario. Todo ello, tras constatar la postura del PSOE.

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