El plan energético impulsado por el Gobierno tiene los votos asegurados de cara a la votación de este jueves. Así lo ha avanzado la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, quien en cualquier caso ha eludido precisar qué grupos darán el respaldo al Ejecutivo.

En cualquier caso, la ministra remarcó que al Ejecutivo le gustaría el "respaldo unánime" de la Cámara para las medidas de ahorro energético tomadas para hacer frente a la subida de los precios derivada de la invasión de Ucrania por Rusia.

"Lo que no se puede hacer es pedir al Gobierno que derogue un decreto aprobado, que ha sido eficaz, ha sido respaldado por la propia presidenta de la Comisión Europea y es fuente de inspiración para otros socios", ha añadido la vicepresidenta tercera en declaraciones a La Sexta.

Por su parte, el ministro de Consumo, Alberto Garzón, ha confirmado que el decreto de ahorro energético se va a tramitar finalmente como proyecto de ley para facilitar su aprobación en la votación de este jueves en el Congreso. "Sí, parece que es el resultado de las negociaciones que están teniendo lugar en este momento a nivel parlamentario. Es la última información que yo tengo", ha apuntado. Garzón, en declaraciones a TVE recogidas por Europa Press. 

En esa línea, Podemos ha pedido este miércoles al PSOE que, en las horas que quedan hasta que este jueves se vote en el Congreso el decreto de ahorro energético impulsado por el Gobierno, el PSOE se concentre en reunir los apoyos de los socios de investidura y dé la espalda al PP.

En rueda de prensa, la secretaria de Acción Institucional de la formación morada, María Teresa Pérez, ha señalado que, para Podemos, el PSOE "se equivoca" cuando le "tiende la mano constantemente" a los populares en un "esfuerzo realmente estéril" porque el PP "no está dispuesto ni es capaz de afrontar los desafíos de nuestra época".

Buscar el apoyo del PP es, a su modo de ver, "confundir al electorado progresista" y desde Podemos van a dedicar sus esfuerzos para que el plan energético "salga con la mayoría progresista y plurinacional", a la que piensan acudir –ha dicho– para aprobar otras medidas necesarias y urgentes en lo que queda de legislatura.

Hace unos días los populares argumentaban que otra razón de su negativa a este paquete de medidas era su carácter "autoritario" y controlador. La respuesta de Ribera es clara: "Si sus señorías quieren que se tramite como proyecto de ley, estaremos muy contentos de recibir propuestas e iniciativas concretas". En la misma línea se ha pronunciado la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, en otra entrevista televisiva: "No es que este Gobierno se abra, es que esa posibilidad existe en la tramitación parlamentaria".

Al llegar al Congreso en forma de proyecto de ley el texto admitiría enmiendas antes de llegar al Senado, dándole la oportunidad a los grupos para incluir ahí sus propuestas. 

PSOE y Unidas Podemos necesitan una mayoría simple para sacar adelante la votación y, con el PP a la contra, el Gobierno se centra en amarrar los apoyos de sus socios habituales. Compromís y Partido Regionalista Cántabro (PRC) son los únicos que han garantizado ya su voto afirmativo; EH Bildu y Más País no han desvelado qué botón pulsarán pero parecen favorables al sí; mientras que ERC y PNV guardan silencio por ahora.

Si el decreto cae en el Congreso lo harán con él algunas de las medidas del plan de ahorro que ya han entrado en vigor. Es el caso de los límites a la temperatura de calefacción y aire acondicionado en comercios y edificios públicos, o los horarios de apagado de escaparates. Recomendaciones que la líder del PP en Madrid, Isabel Díaz Ayuso, anunció que recurrirá ante el Tribunal Constitucional con la connivencia de Alberto Núñez Feijóo.

Ribera, pese a que sabe que tampoco contará con el apoyo de Vox ni, presumiblemente, de Ciudadanos, confía en que el paquete de medidas salga adelante en el Parlamento: "Pensamos que merecen el apoyo de la Cámara de forma unánime", sostiene.  "Es tan de sentido común que no se entiende la negativa por parte de ningún grupo político", subrayó este martes la ministra portavoz, Isabel Rodríguez. Pero la aritmética parlamentaria se le vuelve a complicar al PSOE.