O el PSOE acepta las enmiendas para retirar cualquier mención al terrorismo de las exclusiones de la amnistía, o Junts tumbará la ley en el Congreso. La dirección de la formación ha advertido este martes en un comunicado que no votará a favor de la proposición de ley de amnistía, que se empezará a debatir, en el Congreso de los Diputados, a partir de las 15 horas, a no ser que el Partido Socialista acceda a apoyar algunas de sus enmiendas. Los matices que aportan los de Carles Puigdemont les generan más seguridad ante un posible "boicot", según el comunicado, por parte de "diversos estamentos judiciales".

"Junts siempre ha defendido que la ley de amnistía debe incluir a todos y ha de ser de aplicación inmediata. La propuesta de amnistía que se vota hoy no garantiza estos dos objetivos, sobre todo vista la deriva de diversos estamentos judiciales para boicotear la ley y dejar a muchos independentistas fuera", reza el comunicado, que ha remitido Junts a los periodistas mientras se estaba celebrando la Junta de Portavoces previa al pleno.

Las negociaciones, en cualquier caso, continúan. De nuevo, PSOE y Junts irán al límite y llevarán el diálogo hasta minutos antes del inicio del pleno, o incluso de la votación, como ya ocurrió cuando el Congreso terminó validando dos de los tres decretos que llevó el Gobierno a la Cámara Baja a principios de enero. 

JxCat teme que el alcance de la ley se vea limitado por la actuación del juez Manuel García-Castellón, que investiga por delitos de terrorismo al expresident Carles Puigdemont y a la líder de ERC Marta Rovira, así como del titular del juzgado de instrucción número 1 de Barcelona, Joaquín Aguirre, que dictó un auto sobre el caso Volhov en el que considera que Puigdemont y miembros de su entorno mantuvieron "estrechas relaciones personales" con Rusia.

¿Qué ocurre si Junts tumba la ley? Este martes se votan tres cosas distintas. Por una parte, cada una de las enmiendas que presentaron los distintos grupos. Por otra, el dictamen de la Comisión de Justicia. Y, por último, el conjunto del texto de la ley. Si Junts vota a favor del dictamen (para el que solo se necesita mayoría simple), pero en contra del texto final, la ley volverá, tal y como confirman fuentes parlamentarias, a la Comisión de Justicia para reprender la negociación entre las partes con el plazo máximo de un mes.

Moncloa no se pronuncia

Por su parte, la portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, no ha querido pronunciarse sobre el estado de las conversaciones con Junts y la votación de la ley en el Congreso. "Máximo respeto al poder legislativo", ha repetido en varias ocasiones durante la rueda de prensa celebrada en Moncloa tras el Consejo de Ministros.

Fuentes del Gobierno tampoco aclaran qué pasará esta tarde en el Congreso. Pero sí deslizan que tendrán que ser los grupos parlamentarios quienes expliquen su posición.

"Desde el Gobierno siempre hemos mostrado el compromiso con esta ley y con su objetivo, que es mejorar la convivencia en Catalunya y de Catalunya con el resto de España. El redactado de la ley se conoce. Siempre hemos defendido su legalidad y seguridad jurídica que queda reflejado en el proyecto de ley que está en el Congreso. Pero le corresponde a los grupos acometer el debate del mismo", ha señalado Alegría.