Los dos activistas ecologistas del colectivo Extinction Rebellion que llevaban 33 días de huelga de hambre han anunciado que finalizarán la protesta esta madrugada. La decisión llega después de haberse reunido este miércoles con la vicepresidenta para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, a quien han reclamado en persona medidas eficaces contra la crisis climática y la creación de una asamblea ciudadana.

Los dos activistas, según ha podido saber Público, valoran positivamente que Ribera haya accedido a reunirse con ellos en un encuentro que ha durado aproximadamente tres cuartos de hora. Sin embargo, informan de que no han conseguido arrancar ningún compromiso concreto de parte de la política socialista. "Lamentamos que hayamos tenido que pasar 33 días sin comer para que parte de la sociedad civil pueda hacerse oír", dice Grian Cutanda, uno de los dos huelguistas.

Los ecologistas han hecho hincapié en la necesidad de articular asambleas ciudadanas en España y han pedido al equipo de la vicepresidenta que se tenga como referencia a Francia, donde este movimiento asambleario ya existe y está compuesto por cerca de 2.000 ciudadanos elegidos aleatoriamente. Además, los dos activistas han instado a Teresa Ribera a organizar reuniones regulares con los colectivos ecologistas españoles.

El Ministerio para la Transición Ecológica ya publicó en mayo una orden ministerial para la creación de las Asambleas Ciudadanas para el Clima, sin embargo, sus características no terminan de satisfacer a los ecologistas ya que las decisiones que se alcancen en este organismo no serán vinculantes para el Gobierno.

Si bien el encuentro no se ha saldado con ningún compromiso, desde Extinction Rebellion consideran que el ayuno ha tenido unas repercusiones importantes en parte de la opinión pública. "Hemos conseguido que se hable del tema en los medios, y eso ya es importante", sostiene Cutanda, quien informa de que en el último mes han recibido el apoyo constante de ciudadanos preocupados por la crisis climática.

Durante este miércoles, centenares de personas de todo el mundo se han sumado a un ayuno simbólico en apoyo a los dos activistas. Según la organización ecologista, personas de Nueva Zelanda, Uruguay, Paraguay, México, Argentina, Brasil, Francia o Reino Unido han secundado esta jornada de protesta en apoyo a los activistas de España.