La Policía Nacional ha detenido a un empresario hostelero de 53 años en Alacant, acusado de un delito de trata de seres humanos con fines de explotación laboral al tener a un joven en situación irregular trabajando 16 horas al día por 300 euros al mes, de los cuales el empresario le descontaba 100 por ofrecerle alojamiento.

La explotación del joven no se limitaba a tenerle ese número de horas trabajando en el negocio. Además, solo podía alimentarse durante esas largas jornadas de las sobras de los clientes. Fuera del bar, el joven también estaba obligado a cuidar a una persona de avanzada edad, familiar del empresario, al que ayudaba con la limpieza del hogar y con el mantenimiento de un huerto que había en la vivienda.

El cuerpo policial ha explicado que los agentes conocieron el pasado agosto que un joven argelino en situación irregular podría estar trabajando sin contrato laboral para un empresario hostelero de la zona de Alicante.

El empresario habría conocido a la víctima en un curso formativo que impartía cuando la misma era menor de edad, donde al parecer habría aprovechado la situación de vulnerabilidad y el desconocimiento del idioma de este para ofrecerle trabajo.

El joven recibía insultos y amenazas continuas

Al parecer, el empresario pagaba 300 euros al mes al hombre, 400 en temporada alta y le descontaba posteriormente 100 euros de dicho sueldo por ofrecerle alojamiento.

Asimismo, las condiciones laborales de la víctima eran extremadamente duras, dado que solo se le permitía alimentarse de las sobras de comida de los clientes del establecimiento, y durante su jornada laboral habría estado sometido a insultos, vejaciones y amenazas con devolverlo a su país de origen por estar en situación irregular.

El detenido, con antecedentes policiales previos, ha pasado a disposición judicial, ha informado el cuerpo policial en un comunicado.