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Trabajar en la feria de Sevilla: jornadas diarias de 15 y 16 horas, precio a convenir

La Asociación Andaluza de Hosteleros de Feria amenaza con paros y los sindicatos y el Gobierno les recuerda que la ley hay que cumplirla. Las jornadas de trabajo en las casetas van en muchos casos desde la una o las dos de la tarde hasta el cierre de la caseta, habitualmente de madrugada, a lo largo de siete u ocho días consecutivos.

Un trabajador en la feria de 2017. archivo
Un trabajador en la feria de 2017. Archivo. Europa Press

La Feria de Abril en Sevilla, que este año, el 1 de mayo, retorna tras dos años de parón por la pandemia, supone una fuente de ingresos millonaria (algunos cálculos del Ayuntamiento hablan del 3% del PIB local) en una ciudad con una tasa de paro que está en torno al 20%. El ajetreo en esos días es frenético. Quien sostiene todo el tinglado son los caseteros y los trabajadores, los camareros, los cocineros… 

En el real de la feria hay más de mil casetas, la mayoría privadas, según los datos del Ayuntamiento, y por tanto la casuística es amplísima. Hay quien cumple con todos los perejiles con la legislación laboral y hay quien no, también, según los sindicatos, que, año tras año denuncian incumplimientos en la Inspección de Trabajo, que se investigan en función de los escasos medios de que dispone la institución. 

Las jornadas de trabajo en las casetas alcanzan las 15 y 16 horas, desde la una o las dos hasta el cierre de la caseta (habitualmente de madrugada) a lo largo de siete u ocho días consecutivos. Los trabajadores, algunos, no están dados de alta, o lo están solo por unas horas.

El salario es a convenir. Alguien con años de experiencia puede embolsarse 1.800 euros trabajando a destajo, sin apenas descansos y al ritmo demoledor de la feria. Alguien que empieza y es una de sus primeras ferias, puede trabajar por unos 700 euros, según ha recabado Público de personas que van a trabajar este año en la Feria y que, por razones obvias, prefieren no dar su nombre: "A lo mejor por abrir el pico no contratan, y a lo mejor, el casetero no contrata otra vez".

El sindicato UGT calcula que los salarios que se pactan suelen estar de media entre los 1.200 y los 1.300 euros, una cifra que se aproxima muy mucho a lo determinado legalmente, que en el caso de un camarero con su contrato de ocho horas y sus cuatro horas extra y sus 12 horas de descanso entre jornadas, tal y como establece el Estatuto de los Trabajadores desde 1980, sería, según el convenio de hostelería de la provincia de Sevilla de 1.132,1 euros.

A esta cuantía habría que sumar, obviamente, las cotizaciones. Si alguien no está dado de alta, el empleador paga menos. En este sistema de salario cerrado se ahorran las cotizaciones sociales y las horas de descanso que pertenecen al trabajador.

El foco en las condiciones laborales en la Feria, en esta ocasión, no lo han puesto las centrales sindicales, sino que fue, paradójicamente, el 30 de marzo pasado la Asociación Andaluza de Hosteleros de Feria en un comunicado, en el que arremetían contra la reforma laboral de Yolanda Díaz y anunciaban un paro durante la semana de feria.

En la nota, reclamaban un régimen especial que tenga en cuenta las "particularidades" para el subsector y aseguraban que el "nuevo marco de contratación", la reforma laboral, dificultaba y hacía "prácticamente inviable" su "actividad" porque esta "se lleva a cabo por periodos de corta duración, vinculados a las distintas ferias, requiriendo durante dichos periodos de plena disponibilidad y horarios prolongados de atención al público".

Sin embargo, según las fuentes jurídicas consultadas por Público, su actividad es perfectamente compatible con el Estatuto de los Trabajadores, tal y como está hoy redactado, con la reforma laboral incluida. Así, esta norma permite, en su artículo 15, los contratos eventuales de hasta 90 días en el año.

Normativa laboral

"Lo primero que hay que entender [para comprender esta polémica] es que en la Feria nunca se ha cumplido la normativa laboral, se ha violado sistemáticamente", asegura Enrique Jiménez, secretario general de FESMC-UGT Sevilla. 

Los dos años de pandemia han golpeado duro al sector, que en la provincia de Sevilla ha perdido 1.800 trabajadores, según los datos que aporta a Público CCOO, y, en algunas casetas faltan trabajadores. Este es el contexto en el que se mueven los caseteros.

"Si se ofrecen unas condiciones dignas, muchas personas se interesarán en la feria. Si te dicen 1.500 euros, pero vas a trabajar quince horas… Si las patronales hablan de que necesitamos una evolución de calidad en el sector de la hostelería, eso tiene que verse en la aplicación de la normativa laboral. Para tener profesionales en una cocina tan ajetreada como la de la Feria tienes que ofrecer buenas condiciones", afirma a Público el secretario de Acción Sindical de la Federación de Servicios de CCOO de Andalucía, José Antonio Frejo. "Aquí lo que pasa es que para que la gente trabaje tienes que ofrecer condiciones dignas: hay muchos entornos donde no se cumple", afirma.

La reivindicación de la Asociación Andaluza de Hosteleros de Feria ha derivado en una bola de nieve en la que se han difundido todo tipo de bulos sobre la reforma laboral. "No cambia nada, o entorpece el modelo en este subsector, hay empresas de cátering que funcionan en el mercado. Eso es un titulillo que se ha cogido ahí. Si tienes un porcentaje que trabaja de continuo durante varias ferias, lo puedes encajar como fijo discontinuo y si contratas personal para cada feria, tienes el contrato eventual por circunstancias", añade Frejo.

"El problema no está tanto en el modelo de contratación –analiza el sindicalista– como en los descansos. Las 12 horas entre jornadas. El convenio de Sevilla reconoce la jornada irregular, que se tiene que compensar. Pero no podemos vulnerar el hecho de las 12 horas mínimas, que esta en el Estatuto de los trabajadores desde el año 1980. Desde su primera redacción. Fórmulas hay". Por ejemplo, ampliando plantillas.

La propia vicepresidenta del Gobierno, Yolanda Díaz, ha hablado este lunes del asunto. "Lo que se está diciendo es radicalmente falso. La reforma laboral no toca nada relativo a la jornada laboral y mucho menos al descanso. Eso sí, las leyes hay que cumplirlas en todos los sitios", señaló.

Los caseteros, después de que la polémica creciera, están empezando a rectificar. Este lunes, el secretario de la Asociación Andaluza de Hostelería de Feria, Manuel Sánchez, mantuvo una reunión con el subdelegado del Gobierno en Sevilla, Carlos Toscano y anunció que estudian la convocatoria de una asamblea "lo antes posible". Sánchez admitió que en la reunión se les habían aclarado "matices que a lo mejor" desconocían en relación con la entrada en vigor de la reforma laboral y la jornada laboral.

"Todo este ruido que están organizando ahora los caseteros responde más a un intento de legalizar lo que hasta ahora han hecho, para evitar sanciones, multas o pleitos por parte de los entes públicos o del propio personal contratado", analizan fuentes sindicales.

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