El suizo Roger Federer tardó una hora en despachar su compromiso con el español Feliciano López (6-3 y 6-2) y disputará la final del torneo de Basilea, del que es actual campeón, ante el argentino David Nalbandián, que superó a su compatriota Juan Martín del Potro por un doble 6-4.

Será la octava final para el tenista helvético en el año en que ha perdido el número uno del mundo en beneficio de Rafael Nadal. Perdió las de los Masters Sereis de Montecarlo y Hamburgo y las de Roland Garros y Wimbledon. Salió airoso de las de Estoril, Halle y el Abierto de Estados Unidos, éxitos que contribuyeron a nutrir su excepcional palmarés, compuesto por 56 triunfos.

Apenas López inquietó a Federer, que ha ido de menos a más en su torneo natal. Soportó seis juegos el toledano. En el séptimo Federer rompió el saque del español y terminó con su resistencia.

El torneo de Basilea disfrutará de un nuevo capítulo de los duelos entre Federer y Nalbandián, que superó a su compatriota en una hora y veinte minutos.

El tenista cordobés se desquitó desquite de la reciente derrota en el Masters de Madrid frente a su joven rival, de sólo 20 años, con el que compartirá responsabilidades en el equipo argentino en la final de la Copa Davis contra España.

Nalbandián basó su victoria en su mejor saque: logró siete directos frente a seis de su rival y alcanzó un 75 por ciento de primeros, frente al 66 de su adversario, que sólo dominó el encuentro en sus dos primeros juegos.

Federer y Nalbandián se han enfrentado en diecisiete ocasiones. La ventaja es para el suizo, que ha ganado uno más que su rival en la final. Le superó en el más reciente, el único que han disputado en esta temporada. En el Masters Series de Montecarlo, donde necesitó tres sets.