El Gobierno extenderá la ayuda de 420 euros a los parados que se hayan quedado sin prestación desde el 1 de junio. La ampliación de la medida, que en la actualidad sólo beneficia a los desempleados que hayan agotado el subsidio a partir del el 1 de agosto, fue propuesta ayer a los sindicatos durante la reunión que mantuvieron con el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, en la sede del Ministerio.

Pese a que los sindicatos lideraron la contestación a las restricciones temporales que recoge el decreto para recibir la ayuda, ayer tanto Comisiones Obreras como UGT calificaron el paso del Gobierno como 'marcadamente insuficiente'. Desde que el Ejecutivo puso en marcha la iniciativa -el pasado 17 de agosto-, la polémica ha ido en aumento.

Además de la exigencia de haber quedado sin prestación desde el 1 de agosto, el decreto ley que regula la medida establece que sólo tienen derecho a la prestación los beneficiarios con rentas inferiores al 75% del Salario Mínimo Interprofesional y dispone que la prestación tendrá una vigencia de seis meses prorrogables por periodos iguales siempre que la tasa de paro supere el 17%. Tanto UGT como CCOO consideran que se trata de una medida insuficiente.

El principal escollo de la negociación es económico, porque en los términos actuales la iniciativa costará 624 millones de euros y los dos meses de ampliación propuestos ayer supondrán un incremento del gasto de 200 millones de euros. Otro frente problemático para el Gobierno son las comunidades autónomas, ya que los cursos de formación que los beneficiarios de la ayuda deben seguir corren de su cuenta.

El ministro Corbacho advirtió de que las administraciones regionales tendrán que pagar los 420 euros cuando pasen los seis primeros meses de los que el Estado se hace cargo y rechazó ayudas autonómicas que se sumen a la estatal. El PSOE se reunirá esta semana con el resto de grupos parlamentarios para debatir las mejoras al decreto. Hasta la fecha, el Servicio Público de Empleo ha reconocido más de 5.000 solicitudes para recibir la ayuda.

El secretario general de UGT, Cándido Méndez, ha advertido de que muchos parados que tenían contrato temporal y que han agotado las prestaciones se quedarán fuera de la ayuda de 420 euros mensuales si el Gobierno sólo decide ampliar el plazo hasta el 1 de junio.

Méndez ha subrayado que si el objetivo de la medida es el de cubrir al máximo número de desempleados que hayan agotado la protección por desempleo el plazo que debería manejarse no podría ser en ningún caso el planteado ayer por el Gobierno (1 de junio) y mucho menos el 1 de agosto, tal y como figura originalmente en el Decreto Ley que regula esta ayuda.

Los sindicatos piden que la ayuda se amplíe hasta el 1 de enero

En este sentido, el dirigente sindical ha recordado que, en términos de paro, fueron los trabajadores temporales los primeros afectados por la crisis, por lo que si la fecha, a efectos económicos del cobro de la prestación, se adelanta sólo hasta el 1 de junio, muchos de ellos quedarían excluidos, lo que no sucedería si al menos su vigencia se retrotrajera al 1 de enero de este año.

En cualquier caso, Méndez ha señalado que aunque el Gobierno está consultando a los sindicatos, son los Grupos Parlamentarios lo que tienen un papel importante en cómo quedará esta ayuda. En este punto, confia en que puedan llegar a un consenso cuanto antes y ha expresado su deseo de que éste sea 'unánime' a la hora de convalidar esta norma.

'Ojalá sea así y como mínimo que se incorpore la fecha de 1 de enero', ha indicado el dirigente de UGT, que también considera 'ilógico' que la ayuda de 420 euros sólo quiera mantenerse mientras la tasa de paro no baje del 17%. 'Debería rebajarse ese límite', ha apostillado el sindicalista, que ha avisado además de que a partir del mes de agosto volverá a aumentar el desempleo en España.