Público
Público

Manual para 'dummies' neoliberales: por qué es posible limitar los horarios de la hostelería como defiende Yolanda Díaz

Acaudillados por Isabel Díaz Ayuso, los empresarios acusan a la ministra de Trabajo de atentar contra "la libertad empresarial" y de poner en peligro su "modelo de vida". Díaz sólo propone mejores condiciones en un sector ya precarizado.

La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, mantienen una disputa pública a cuenta de los horarios nocturnos en la hostelería.
La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, mantienen una disputa pública a cuenta de los horarios nocturnos en la hostelería. Público

Yolanda Díaz, vicepresidenta del Gobierno y ministra de Trabajo, propuso este pasado lunes ajustar los "irracionales" horarios nocturnos de la hostelería en España y retribuir mejor a quienes trabajen a partir de las 22.00 horas de la noche. Su propuesta ha generado una gran ola de indignación en la derecha política –especialmente en Isabel Díaz Ayuso– y en la patronal de la hostelería.

Las críticas han sido especialmente feroces como ya lo fueron hace dos años cuando se propagó el bulo de que la reforma laboral iba a impedir la celebración de la Feria de Abril en Sevilla porque no se iba a poder  contratar camareros que trabajaran más de ocho horas en las casetas. 

Ahora, la mayoría de las asociaciones hosteleras acusan a la ministra de Trabajo de mentir y de poner en jaque "la libertad empresarial". El tono de los reproches ha sido tan elevado y el ruido de las descalificaciones tan excesivo que se ha llegado a decir que Díaz busca la ruina de España o que quiere imponer el comunismo en el país. 

Los críticos de Yolanda Díaz han sido acaudillados por Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, con quien la ministra de Trabajo ha mantenido un cruce de declaraciones sobre este asunto. Ayuso reaccionó con una inmediatez inusitada a las palabras de Díaz. Sus reproches, publicitados en su cuenta de Twitter, condensan todas las críticas a Díaz y han sido replicados por los empresarios hosteleros dentro y fuera de Madrid. "España tiene la mejor vida nocturna del mundo, con las calles llenas de vida y libertad. Y eso también da empleo. Nos quieren puritanos, materialistas, socialistas, sin alma, sin luz y sin restaurantes porque les da la gana".

El mensaje de Ayuso está construido en torno a la hipérbole, el exceso y la exageración. Al igual que ocurriera hace dos años, cuando se demostró que era un bulo lo de la Feria de Abril –aunque finalmente Díaz tuvo que desplazarse a Sevilla para servir cañas en una caseta para apagar los ecos de la polémica–, las acusaciones de Ayuso y de todos los que censuran a Díaz son fácilmente rebatibles: sólo basta ampararse en la ley y aplicar cierto sentido común

Lo que ha dicho y no ha dicho Yolanda Díaz sobre la libertad

Una de las principales acusaciones contra Yolanda Díaz es puramente ideológica. Se repite como un mantra que con su propuesta la ministra de Trabajo quiere atentar contra libertad de los empresarios y ya de paso contra la libertad en general, esa que se según Ayuso consiste en poder tomarse una caña. En ese paroxismo, Jorge Buxadé, coordinador jurídico de Vox, acusa a Díaz de tratar de impedir que haya "alegría y fiesta" en España para instaurar el "terror comunista". Un mensaje idéntico al de Ayuso.

En realidad, Yolanda Díaz no ha impuesto nada; ni tan siquiera ha dicho en puridad que los restaurantes deban cerrar antes de la 1.00 de la madrugada. Lo ha sugerido. Sus palabras son más bien moderadas y de ellas no se puede deducir imposición ninguna. Ella más bien habla de reducir la jornada laboral en todos los sectores y, de entrada, no ampliar horarios en un sector tan precarizado como el hostelero: "No es razonable un país que tiene abiertos sus restaurantes a la una de la madrugada; el otro día me reunía con las patronales del sector turístico y hablábamos de las diferencias con el resto del Europa; es una locura pretender casi seguir ampliando los horarios hasta no se sabe qué hora. Por tanto, creo que este es uno de los objetivos más importantes que tenemos". 

Entre imponer y decir que "no es razonable" hay un gran techo.

Las 2.00 horas, hora límite, pero casi nadie la cumple

En el hipotético caso de que la propuesta de Díaz saliera adelante, la diferencia con el horario actual sería, en cualquier caso, menor: aunque son las comunidades autónomas las que establecen los horarios, la legislación actual establece por norma las 2.00 horas de la madrugada como horario límite de cierre para un restaurante;  media hora más los fines de semana. Es una hora de diferencia. No parece que eso suponga un gran perjuicio económico, sobre todo si se tiene en cuenta que en la práctica la mayoría de los restaurantes cierran la cocina incluso antes de la 1.00 horas; casi nadie se pone a cenar a esa hora -como mucho se alarga la sobremesa- por mucho que en España nos guste la noche. 

Un convenio de hostelería recién aprobado en Madrid

Esta polémica llega apenas unas semanas después de que se haya aprobado el Convenio Colectivo de Hostelería y Restauración de la Comunidad de Madrid para los años 2023-2025 entre patronal y sindicatos. El texto es claro: regula las vacaciones, las libranzas, las normas de contratación de los empleados y establece que el empleado en Madrid trabajará un máximo de 44 horas semanales con dos días de descanso a la semana que forzosamente deberán ser consecutivos si en el local tiene 20 trabajadores o más. 

Es cierto que dicho convenio admite cierta flexibilidad en la jornada y que aumenta la bolsa de crédito horario de la jornada irregular: pasan de 88 a 100 horas al año el número de horas que se puede trabajar para que se pueda aumentar la jornada laboral en función de las necesidades de la empresa. En cualquier caso, es un número limitado de horas.

La vida nocturna en España, ¿a qué precio?

"Toda Europa está modificando sus horarios para parecerse a nosotros", afirmaba este pasado lunes José Luis Yzuel, presidente de Hostelería de España, la organización hostelera más importante a nivel estatal, quien compite con Ayuso en su voracidad por atacar la propuesta de Díaz. Yzuel no aporta pruebas de que esa afirmación sea cierta, como tampoco lo hace cuando afirma que "España tiene la mejor hostelería, ocio y vida nocturna del mundo". Lo que olvida mencionar Yzuel es que la hostelería en España es un sector muy precarizado, donde los sueldos no son excesivamente altos y las indemnizaciones por despido son bastante bajas. Tampoco menciona Yzuel que lo que plantea Yolanda Díaz es una reducción de la jornada laboral en todos los sectores y pagar más y cuidar más a quienes trabajen más allá de las 22.00 horas. Vida nocturna, sí, pero a un precio justo.

Yolanda Díaz no ha dicho nada de reducir plantillas

"Estamos totalmente en contra y no se sabe exactamente lo que se pretende. Un horario largo significa mayores plantillas, mayores salarios, más consumo y más negocio", aseguraba también este martes José Luis Yzuel. Es una obviedad que Díaz propugna una reducción de jornada, no menos empleados ni tampoco menores salarios

El turismo no está en peligro

En esa loca carrera por ver quién atiza más a Díaz, Yzuel no se ha mordido la lengua. Ha llegado a afirmar que el sector turístico está en peligro: "La oferta y actividad es uno de los pilares de que España sea el primer país del mundo en turismo vacacional, por lo que cualquier experimento que ponga en peligro nuestro modelo de vida, nuestro atractivo turístico y la actividad de las empresas del sector, solo puede provocar el rechazo social y empresarial". 

Esta afirmación se desmonta con un simple dato: durante el año 2023 visitaron España 85,1 millones de turistas, lo que supuso un aumento del 18,7% respecto al año anterior. Las perspectivas para 2024 son incluso mejores. Si se compara esta cifra con 2019, antes de la pandemia, la llegada de turistas se situó un 1,9% por encima. A España llegan más turistas que nunca y consumen más que nunca. El turismo no está en peligro. Eso sí, la mayoría de los turistas, como casi todos los españoles, cenan antes de la 1.00 de la madrugada.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias de Economía