'Hay que revisar profundamente el papel de nuestras diputaciones. Tal y como están configuradas son una cuarta administración que, a mi juicio, sobra', subrayó ayer el candidato del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, antes de participar en una conferencia con jóvenes en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (Santander). Esta opinión que ya expresó como portavoz del Gobierno en junio sirvió de detonante para un nuevo rifirrafe entre socialistas y conservadores.

En las palabras de Rubalcaba, el PP aprecia grandes visos de electoralismo. Creen los conservadores que el candidato del PSOE ha puesto sobre la mesa la posibilidad de suprimir las diputaciones porque los socialistas sólo gobiernan en ocho, frente a las 24 de los conservadores. 'Es como decir: hay 17 comunidades autónomas pero como ha ganado el Partido Popular las quito', intentó resumir Ana Mato, vicesecretaria de Organización del PP.

El PP destaca que de ellas dependen los municipios más pequeños

Después de las elecciones del 22-M, los socialistas han repetido en varias ocasiones la conveniencia de reformar o suprimir estos órganos, cuya función principal es prestar servicios a los municipios más pequeños. Hace un mes, Ru-balcaba consideró 'más pertinente que nunca este debate', por la crisis. Ayer vinculó la reforma a que estos órganos 'forman parte de una estructura del siglo XIX' que debe ser replanteada. 'Si las diputaciones quieren seguir haciendo lo que están haciendo ahora, creo que sobran', señaló.

En su opinión, sería necesario adecuar el funcionamiento de las diputaciones provinciales a 'los tres niveles de la administración que ya están consolidados'. En los últimos meses, varios miembros del PSOE se han manifestado en la misma dirección.

Catalunya resalta 'la falta de utilidad' de las cámaras provinciales

La reflexión del candidato socialista fue bien recibida por la vicepresidenta de la Generalitat de Catalunya, Joana Ortega. 'Hace tiempo que reivindicamos la falta de utilidad de las diputaciones. Defendemos las vegueries', recordó, instando a Rubalcaba a no olvidarse de esta reflexión tras el 20-N.

Pero ninguno de estos argumentos gusta al PP. Al término de su Comité Electoral, Mato sostuvo que hay 15 millones de españoles (los que viven en municipios pequeños) que dependen de las diputaciones y que Rubalcaba, 'se ha olvidado' de ellos. 'Tenemos que hacer las reformas pensando en los ciudadanos y no en clave de los resultados electorales', añadió. Mato no hizo ninguna propuesta concreta de cómo abordará el PP ese debate si gobierna tras el 20-N, ni dio alguna pista de cómo se recogerá el asunto en el programa sobre el que trabaja el equipo que ella coordina. Se limitó a asegurar que 'hay que reformar y modernizar la administración y evitar duplicidades'.

'La administración del Estado debe de estar al servicio de los ciudadanos', apuntó antes de subrayar que hay que hacer que la gestión sea 'lo más austera posible, lo más asequible posible y que brinde los mayores beneficios a los ciudadanos'.