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Análisis Vox La tibieza de Ciudadanos con Vox para tratar de recuperar a los votantes 'fugados' 

La tesis que maneja el partido de Inés Arrimadas es que si empezaran a atacar duramente a Vox y se refirieran a ellos como una organización de extrema derecha sus votantes "se ofenderían". "Hay gente que puede volver a votarnos", señalan.

El portavoz adjunto de Ciudadanos en el Congreso, Edmundo Bal (d), la líder de Ciudadanos Inés Arrimadas (c), y el líder de Vox Santiago Abascal (i), durante la segunda jornada del debate de su investidura como presidente del Gobierno este domingo en el C
El portavoz adjunto de Ciudadanos en el Congreso, Edmundo Bal (d), la líder de Ciudadanos Inés Arrimadas (c), y el líder de Vox Santiago Abascal (i), durante la segunda jornada del debate de su investidura como presidente del Gobierno este domingo en el Congreso de los Diputados. Mariscal / EFE

marta monforte

Ciudadanos se define como una formación netamente "centrista", pero sus votantes no piensan lo mismo: sus fugas se producen por la derecha, no por la izquierda. El partido liderado por Inés Arrimadas ha tratado de resituarse después de que el anterior líder, Albert Rivera, tratara de competir por la derecha con el Partido Popular. Una estrategia que pareció la indicada en su momento —en abril del 2019 obtuvieron 57 escaños y se quedaron a apenas 9 de 'sorpassar' al PP— pero que finalmente fracasó: en apenas seis meses perdieron más de 2 millones y medio de apoyos. Obtuvieron 10 escaños. Rivera dimitió.

De esos más de dos millones de votos perdidos, 1,5 se fueron al bloque de la derecha: 800.000 al PP y 650.000 a Vox. También el PSOE recibió exvotantes de los naranjas, aproximadamente unos 200.000. Y casi un millón de votos restante —900.000—se fueron a la abstención. Los datos internos de la formación coinciden con los de empresas demoscópicas como Gad3, que sitúan en torno al 15% la fuga de votos de Cs hacia Vox. Desde el año 2016 su electorado ha preferido, mayoritariamente, a la extrema derecha sobre los 'populares'.

Ese es el principal motivo por el que los naranjas evitan llamar "extrema derecha" a Vox, según reconocen miembros de la dirección de Cs a Público. Los dirigentes de Cs optan por referirse a ellos como "populistas", pese a que el populismo—según la ciencia política— no es una ideología ni un movimiento político, sino una forma de análisis discursivo. En la mayoría de episodios en los que está involucrada la extrema derecha, como en el reciente asalto al Capitolio de Estados Unidos instigado por el presidente saliente Donald Trump, los miembros de Cs culpan a los "populismos". Así, en general.

En Cs no quieren "ofender" a los votantes de Vox

"No todos los votantes de Vox son de extrema derecha", señala una voz del núcleo duro de Arrimadas. "Los dirigentes de Vox lo son, pero no sus votantes", matiza. La tesis que maneja Ciudadanos es que si empezaran a utilizar esa nomenclatura para referirse a Santiago Abascal, Javier Ortega Smith o Macarena Olona sus votantes "se ofenderían". "Y a ellos me los tengo que ganar. Hay gente que puede volver a votarnos", confiesan sin ambages. Y resumen: "Hay que tener cuidado, así que lo mejor es no llamarles nada".

Las fuentes consultadas señalan que aquellos votantes que en su día optaron por Ciudadanos y que luego se pasaron al partido que preside Abascal no lo ven como un partido de extrema derecha con falangistas y fascistas en sus filas.  Y justifican la transferencia aludiendo a que el voto a Vox es el "voto de castigo" al bipartidismo, especialmente al PP, que en 2015 y 2016 supo atraer Cs.

La dirección de Ciudadanos también explica el 'traspaso' con la sentencia del juicio del 'procés', que provocó todo un terremoto político, social y judicial en plena precampaña. El tribunal presidido por el magistrado Marchena condenó a los presos catalanes por malversación y sedición, lo que provocó manifestaciones y disturbios en las calles. En Cs opinan que esa polarización acabó beneficiando al "populismo de Vox", con medidas como ilegalizar a los partidos independentistas, a "alternativas enmarcadas en la legalidad". 

"Vox moviliza a la extrema izquierda"

Así como los dirigentes de Ciudadanos se niegan a tildar a los ultraderechistas como tal, no tienen problema alguno en etiquetar a los líderes de Podemos en la "izquierda radical", a los de Esquerra Republicana en el "totalitarismo" o a los de EH Bildu como políticos favorables a la banda terrorista ETA. Los naranjas saben que de esos tres partidos no van a arañar ningún voto y compiten en dureza con Vox y con el PP por conquistar a ese votante más a la derecha.

Sin embargo desde Ciudadanos aseguran que las elecciones "solo se ganan desde el centro" y "lo que hace Vox es movilizar a la izquierda radical" por su estrategia polarizadora, lo que al final y—paradójicamente— contribuye a la derrota de la derecha. "Nosotros movilizamos menos", señalan desde el partido. Aun así, los naranjas son conscientes de que gobiernan en tres autonomías y en el Ayuntamiento de la capital gracias a los votos de los ultraderechistas .

Los próximos comicios tendrán lugar en Catalunya, donde Ciudadanos fue primera fuerza en 2017con 36 escaños tras consiguir pescar del caladero de los votantes del PSC. Ahora las encuestas —internas y externas— les sitúan en la cuarta posición, y algunas de ellas auguran que un 20% de sus votantes se irán a Vox.

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