Tres años ha estado encallada la aprobación de la primera Ley de Vivienda en España. Esta legislación pionera, uno de los compromisos más importantes de la coalición, ha marcado todas las negociaciones presupuestarias de la legislatura entre el Gobierno y sus socios. Es tan imposible explicar las tensiones negociadoras dentro del Ejecutivo y fuera de él sin hablar de esta ley como lo sería aproximarse a los problemas estructurales del país sin colocar el acceso a la vivienda en los primeros puestos.

Nadie se atreve a negarlo. Nadie difiere tampoco en que los jóvenes son los que más sufren las consecuencias de un mercado inmobiliario disparado desde hace décadas. El alcance de las políticas de vivienda es tan transversal que el PSOE ha dado el pistoletazo de salida a la campaña electoral del 28M desbloqueando la norma y anunciando la ampliación del parque público de vivienda con 50.000 pisos de la Sareb. El PP esta vez no estaba desprevenido. Génova lleva tiempo preparando una propuesta alternativa para cuando llegara el momento.

Fue este martes. Mientras el Consejo de Ministros daba luz verde a los planes con la Sareb, el PP improvisó una puesta en escena con Alberto Núñez Feijóo explicando a un grupo de jóvenes su receta en materia de vivienda. Un coloquio organizado entre Génova, el PP de Madrid y Nuevas Generaciones que se celebró en una azotea de moda del centro de la capital —'Rooftop' Doñaluz, entre la Puerta del Sol y la calle Gran Vía, una de las zonas más castigadas por la gentrificación de la ciudad—.

Hasta la intervención final de Feijóo el acto pareció el primer mitin de campaña de Isabel Díaz Ayuso: "Los madrileños y todos los que vivimos en Madrid tenemos una gran suerte", aseguró Ignacio Dancausa, presidente de NNGG en Madrid y uno de los jóvenes llamados a explicarle a Feijóo sus problemas de acceso a la vivienda.

Es el mismo Dancausa al que la Policía Nacional identificó, junto a otros miembros de NNGG y asesores del Ayuntamiento de Madrid, tratando de interferir en el proceso electoral de la Universidad Complutense para que Joaquín Goyache continuase como rector. 

Ni Dancausa ni Paula de las Heras, la otra joven que se sentaba junto a Feijóo y que es también secretaria general de NNGG en Madrid, expusieron ningún problema concreto al que se enfrenten. El coloquio distó mucho de ser un encuentro del líder de la oposición con la sociedad civil y fue un acto de partido en toda regla con repetidas reflexiones como esta, de De las Heras: "Muchos se quedan en el camino porque Pedro Sánchez no ha conseguido unas políticas que nos hayan ayudado (...). Gracias a Dios, tenemos a Isabel Díaz Ayuso"

El PP no hablaba de vivienda hasta ahora

El PP ha tirado esta vez de la misma escenificación que tanto ha criticado a Pedro Sánchez y se ha rodeado de militantes y afines, esta vez jóvenes porque el relato lo requería, para presentarse cercano a las problemas sociales. "Ha contraprogramado con un acto del partido la agenda legislativa del Gobierno", analiza Verónica Fumanal, experta en comunicación política y liderazgo. Y apunta: "La izquierda ha ganado en el momento en el que el PP empieza a hablar de vivienda, que nunca ha sido un tema que haya estado en su agenda".

Entre las propuestas del PP de las que Feijóo ha dado este martes alguna pincelada y que serán explicadas por su equipo en los próximos días está un paquete de ayudas para los jóvenes que incluye avalar un 15% de la compra de una primera vivienda y un nuevo cheque de 1.000 euros para la emancipación. También proponen avalar la fianza del alquiler e incrementar las cesiones de suelo dotacional en ayuntamientos y comunidades autónomas para construir viviendas bajando un 40% de la renta de alquiler.

En Moncloa, poco después del acto de Feijóo se celebraba la rueda de prensa del Consejo de Ministros. La portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, tuvo que contestar varias preguntas sobre vivienda. También la vicepresidenta primera, Nadia Calviño, que presentaba el plan de movilización de 50.000 viviendas de la Sareb. "Las políticas de vivienda del PP son fracasadas: corrupción, especulación, burbuja inmobiliaria y desahucios", destacó la primera.

El PSOE respondió a Feijóo

La portavoz tenía preparado también el contrataque a la escenificación del líder del PP. Le acusaba de "falta de sensibilidad" al presentar sus propuestas precisamente en uno de los lugares de nuestro país donde es más prohibitivo el acceso a una vivienda. "Están pagando 6.000 euros por metro cuadrado y 2.000 euros por un apartamento", afirmó Rodríguez.

El equipo de Sánchez se frotaba las manos y fuentes de Moncloa transmitían ya que la comparación de los dos modelos sobre vivienda iba a ser potente. "Se van a ver claras las diferencias. Él se va a Gran Vía y nosotros con jóvenes a Leganés y vivienda pública", destacaron al término de la mencionaba rueda de prensa.

El vídeo del presidente del Gobierno en la ciudad periférica madrileña se difundía poco antes de las 15.00. "He estado con un grupo de jóvenes en Leganés, donde se está haciendo una importante apuesta por la vivienda pública. Trabajamos para que en España un 20% de la vivienda sea pública. Para que el acceso a la vivienda no sea un problema, sino un derecho como dice la Constitución", señalaba la cuenta oficial de Sánchez en Twitter.

Para los socialistas, este martes se han evidenciado "los dos modelos frente a frente". Es decir, a Sánchez visitando una promoción de vivienda pública junto a jóvenes a los que beneficiarán estas medidas, y Feijóo en un local del centro de Madrid solo con las NNGG y "hablando de lo de siempre: recalificar suelo". "Luego viene la especulación, y otra burbuja. Esa película ya la hemos visto todos y no queremos volver a verla. Por eso se la cuenta a los más fieles", señalan desde las filas del PSOE.

En el PSOE están convencidos de que hay que hablar de vivienda durante la campaña electoral. Por ello pusieron el foco en este asunto durante la Conferencia Municipal celebrada este fin de semana en València. Hay que tener en cuenta que serán los Ayuntamientos y las comunidades autónomas quienes tendrán que desarrollar las principales medidas estrella de la nueva ley. En el PP ya han dicho que no la aplicarán y han anunciado que recurrirán al Tribunal Constitucional. La batalla está servida.