El PSOE aprueba este domingo, en el marco de su convención política que se celebra en A Coruña, un documento estratégico con las líneas principales para los próximos años. En el texto, denominado "Impulso de país", se incluyen algunas cuestiones de política exterior e internacional. Sin embargo, no hay ninguna mención a la situación del Sáhara Occidental. 

La decisión tomada por Pedro Sánchez y el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, en marzo de 2022 para restablecer las relaciones con Marruecos ha sido uno de los asuntos más criticados desde el resto de organizaciones políticas. Tanto desde la izquierda como desde la derecha. Todo el arco parlamentario afeó el aval a la autonomía que propone el reino alauí para el territorio saharaui como solución al conflicto. 

En el texto, de 100 páginas, no se incluye ningún tipo de referencia a la situación de este conflicto ni sobre la población saharaui. Sí que hay espacio para Marruecos. "Las relaciones con el Norte de África siempre serán prioritarias para España. La relación histórica entre España y nuestros vecinos inmediatos al sur del Mediterráneo trasciende con mucho la geografía. Con Marruecos, se ha abierto un nuevo capítulo en la relación bilateral y debemos trabajar para seguir consolidándola", señala el texto sin entrar en más detalles. 

También una mención específica a Argelia. Un país clave en el conflicto. Los campamentos de población refugiada saharaui se encuentran en Tinduf, territorio argelino. El país es además uno de los aliados más firmes del Frente Polisario, representante legítimo del pueblo saharaui ante la ONU. La relación con ambos se rompió tras el giro de Sánchez sobre la cuestión saharaui. 

"España siempre hará todo lo posible para mantener las mejores
relaciones con Argelia, un pueblo hermano y un socio estratégico", señala el documento aprobado por el PSOE este fin de semana. Este país ha ido poco a poco normalizando las relaciones con España. Su embajador ha vuelto a nuestro país y los intercambios comerciales se van recuperando. Curiosamente, la decisión de Argelia se basa en que el discurso realizado por Sánchez ante la ONU fue positivo.

El pasado mes de septiembre, Sánchez defendió en Nueva York, en la sede de la ONU, "una solución política mutuamente aceptable y en el marco de la Carta de las Naciones Unidas y de las resoluciones del Consejo de Seguridad" para el conflicto del Sáhara Occidental. Evitó, como ya hiciera en 2022, mencionar el aval a la autonomía, firmado en una carta enviada a Mohamed VI en marzo de ese año. 

Los socialistas sí que decidieron mantener menciones al Sáhara Occidental en su programa para las elecciones generales de 2023. "En relación con el Sáhara Occidental, seguiremos apoyando al enviado personal del secretario general de Naciones Unidas para alcanzar una solución mutuamente aceptable en el marco de las Naciones Unidas. Mantendremos la ayuda humanitaria a la población saharaui en los campamentos, como hemos hecho siempre, siendo España el principal donante bilateral", apuntaba ese documento. 

La posición del PSOE, más allá de las declaraciones públicas y hechos, ha ido cambiando en sus documentos desde hace años. En el programa electoral de 2019 mencionaban expresamente "el derecho de autodeterminación del pueblo saharaui". "Trabajaremos para alcanzar una solución del conflicto que sea justa, definitiva, mutuamente aceptable y respetuosa con el principio de autodeterminación del pueblo saharaui". Dos años después, en los documentos del 40º Congreso, celebrado en el mes de octubre de 2021 se eliminaba la referencia a esa "autodeterminación".

Israel y Palestina 

El documento estratégico, en materia internacional, incluye multitud de referencias a la guerra en Ucrania. También a las relaciones en el seno de la UE y con América Latina. Y se detiene en la situación en Oriente Medio entre Israel y Palestina. Sánchez ha hecho bandera de la defensa del Estado palestino frente a una comunidad internacional más tibia, pese a que sus socios de izquierda le piden más pasos. 

"España –junto con otros 87 países– considera necesario convocar una conferencia internacional de paz lo antes posible, tras el cese de las hostilidades. La comunidad internacional deberá acompañar a las partes y proporcionar una perspectiva de solución seria, justa y creíble basada en la fórmula de los dos Estados, Palestina e Israel, que convivan uno junto a otro, en paz y seguridad", apunta una de las partes del texto.

"Eso implica trabajar por el reconocimiento del Estado de Palestina por parte de los países occidentales que aún no lo han hecho, incluyendo España y la mayoría de países occidentales, y también por el reconocimiento de Israel por sus vecinos y otros países", añaden. 

Desde Sumar se ha reclamado a Sánchez coherencia entre las posiciones que mantiene en defensa del pueblo palestino y las que tiene con el pueblo saharaui. En la misma línea se ha expresado el Frente Polisario. "Desde el pueblo saharaui aplaudimos la postura del Gobierno de España en cuanto a lo que padecen nuestros hermanos y hermanas palestinos en Gaza, pero también nos preocupa la incoherencia de exigir eso y a la vez ignorarlo en el Sáhara Occidental", declaró hace unas semanas el delegado del Polisario en España, Abdullah Arabi.