'Sumar', la asociación de Yolanda Díaz, ya tiene estatutos y está lista para iniciar el proceso de escucha

La asociación Sumar que dará cobertura organizativa y jurídica al proceso de escucha que Yolanda Díaz iniciará tras las elecciones andaluzas, ya está preparada para echar andar. El Ministerio del Interior ya ha validado su registro (el equipo de la vicepresidenta segunda estaba pendiente de este paso) y ya dispone, incluso, de unos estatutos, a los que ha tenido acceso Público.

En estos estatutos se recogen, entre otras cuestiones, los objetivos, fines y actividades a los que Sumar se dedicará durante ese proceso de escucha de la sociedad civil, que comenzará después del 19 de junio y tendrá una duración aproximada de seis meses.

Desde el principio, el entorno de Díaz dejó claro que se trataba del registro de una "asociación" que serviría como base jurídica y organizativa del proceso y en ningún caso de un partido, plataforma o marca electoral (que, en todo caso, se precisa desde el entorno de la vicepresidenta, sería uno de los últimos pasos de la configuración del proyecto que se quiere llevar a cabo, y tendría que ser decidido de forma colectiva por los actores que participen en el mismo).

En sus estatutos, Sumar tiene como fines principales "promover el compromiso democrático y la participación de la ciudadanía en la vida pública; fomentar y fortalecer la participación ciudadana y de la sociedad civil para mejorar la calidad democrática y el desarrollo humano; o contribuir al desarrollo del pensamiento crítico".

Díaz sustentó la necesidad de llevar a cabo este proceso de escucha para acercar la política a la ciudadanía y tratar de paliar la desafección que la sociedad civil mostraba respecto a las instituciones y a la vida pública.

Otros fines de Sumar son: "favorecer el estudio, la investigación, la reflexión y el debate sobre los principales problemas sociales, económicos y políticos de nuestro tiempo". En este sentido, como sucedió con la Convocatoria Cívica por Andalucía de Julio Anguita en los años 80, el proceso de escucha y sus conclusiones podrían codificarse en un programa político basado en las aportaciones de la sociedad civil.

"Procurar el vínculo de los movimientos sociales, ciudadanos y demás entidades de la sociedad civil", y "contribuir a la consolidación de redes de intercambio de experiencias y saberes en el ámbito de la participación democrática", también son fines de esta asociación.

Las herramientas para llevar a cabo estos fines y las actividades previstas también se recogen en los estatutos y ofrecen una imagen de la hoja de ruta del proceso de escucha que quiere iniciar la ministra de Trabajo.

Entre estas actividades están las de "organizar encuentros, reuniones, coloquios, congresos y cualquier otro tipo de actos públicos"; "impulsar espacios de debate, colaboración o cooperación"; "promover la organización de cursos, seminarios, ciclos de charlas o conferencias, eventos de formación y talleres participativos"; o "elaborar y publicar estudios, investigaciones, diagnósticos y materiales de divulgación".

La pasada semana, Yolanda Díaz mantuvo un encuentro con expertos y expertas del sector energético para debatir sobre los retos laborales en esta materia. Desde su entorno destacan este acto como un ejemplo de lo que tendrá lugar durante el proceso de escucha, que quiere alejarse de partidos, siglas y organizaciones políticas.