Así es Alejandra de Rojas, supuesta hija del rey emérito: una aristócrata 'instagramer' emparentada con Esperanza Aguirre
De 42 años, casada y con un hijo, Alejandra de Rojas se mueve como pez en el agua en los selectos círculos de la alta sociedad madrileña. Su padre oficial fue el conde de Montarco, uno de los fundadores de Falange Española.
Madrid-Actualizado a
El diario El Confidencial adelanta este jueves que Juan Carlos I tiene una supuesta hija secreta nacida en 1980 de una relación extramatrimonial del rey emérito con la aristócrata Rosario Palacios, condesa viuda de Montarco, fallecida en 2016. La información señala que este hecho es conocido desde hace tiempo por la propia hija secreta, así como por Casa Real. De hecho, la paternidad extramatrimonial de Juan Carlos I es "un secreto a voces entre las élites", apunta la agencia Europa Press.
La supuesta hija secreta del rey emérito, a la que todo el mundo apunta ahora mismo, se llama Alejandra de Rojas. Aunque El Confidencial no cita expresamente su nombre, sus datos biográficos encajan a la perfección con los ofrecidos en la investigación de este medio.
Alejandra de Rojas es una aristócrata con mucha presencia en las revistas del corazón. Tanto es así, que colabora habitualmente con varias publicaciones del sector, especialmente con la revista ¡Hola!. Se dedica principalmente al mundo de la moda: trabaja como modelo e imagen de numerosas marcas de lujo de ropa y joyas aprovechando que es muy conocida en los círculos de la alta sociedad madrileña. Utiliza mucho sus redes sociales para promocionar su trabajo, pero también para hablar de su vida personal. Es especialmente activa en Instagram.
Casada y con un hijo, Alejandra de Rojas habría descubierto en su adolescencia la identidad de su verdadero padre. A partir de entonces habría comenzado una discreta relación con el rey emérito que se mantendría en la actualidad y de la que nunca ha hablado públicamente.
La supuesta hija del emérito vive con su marido, Beltrán Cavero, y su hijo en el campo, a las afueras de Toledo, en un cigarral llamado Quinta de Mirabel, una casa de recreo con un amplio huerto rodeándola y con unas vistas privilegiadas de la capital toledana.
Dicho cigarral es propiedad de la familia de su marido, quien, curiosamente, es sobrino carnal de Esperanza Aguirre. Cavero es hijo de Piedy Aguirre, hermana de la antigua presidenta de la Comunidad de Madrid, y se dedica a los negocios inmobiliarios.
Pese a vivir en el campo, Alejandra de Rojas viaja con frecuencia a Madrid. En la capital se mueve fundamentalmente por el barrio de Salamanca, donde ha sido vista en varias ocasiones junto a otros amigos de alta alcurnia en los selectos locales de moda de esta exclusiva zona de Madrid.
Además del vínculo con Esperanza Aguirre, en la biografía de Alejandra de Rojas destaca otra relación llamativa: en su juventud mantuvo una relación sentimental con Luis Medina, conocido por el caso mascarillas que afectó de lleno al Ayuntamiento de Madrid. Medina ha sido imputado por una presunta estafa al Ayuntamiento de Madrid tras cobrar abusivas y millonarias comisiones por la venta de material sanitario en marzo de 2020, en los primeros días de la pandemia por covid.
El padre oficial de Alejandra de Rojas fue Eduardo de Rojas Ordóñez, quinto conde Montarco en cuya biografía destaca haber sido uno de los fundadores de Falange Española. Eduardo de Rojas tuvo una relación muy cercana con José Antonio Primo de Rivera. Ejemplo de ello es que en el año 1940, Eduardo de Rojas reveló en el diario Informaciones que José Antonio Primo de Rivera le habría confesado poco antes de la Guerra Civil que "lo mejor para Madrid sería prenderle fuego por los cuatro costados y colocar unos retenes de bomberos en los edificios que mereciera la pena conservar".
Cisma familiar
En cuanto a su familia, Alejandra de Rojas ha vivido lo que podría calificarse como un auténtico cisma familiar. Su padre se casó en segundas nupcias con su madre, 25 años más joven que su padre. La relación entre el conde de Montarco y Rosario Palacios nunca fue bien vista por los hijos del primer matrimonio del conde. Las relaciones familiares se resintieron y surgieron problemas con la herencia al morir su padre en 1995.
Es más, Alejandra nunca tuvo sintonía con sus hermanos y hermanas mayores. A pesar de que su madre sí ostentó el título de condesa de Montarco, ella no lo tiene. Eso no le impide llevar una vida muy acomodada, propia de cualquier aristócrata y de su privilegiada condición: vida apacible en el campo, equitación, viajes puntuales a Madrid a atender sus negocios, etcétera.
Ella por el momento guarda silencio tras este bombazo que ha hecho temblar los cimientos de la monarquía y ha situado de nuevo a Juan Carlos I -que el martes abandonó Vitoria para regresar a Abu Dabi tras seis días en nuestro país- en el ojo del huracán mediático.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.