Cuando descansar en casa se vuelve un privilegio: la expansión de los Airbnb pone en riesgo los derechos de los inquilinos

A las 06.30 horas, Paula (nombre ficticio para preservar su anonimato) se sobresalta al escuchar el timbre de su puerta. Intrigada y aún somnolienta, se levanta y pregunta quién está al otro lado. Una voz le responde, disculpándose y explicando que en la página de su alojamiento de Airbnb se indicaba que, en caso de no obtener respuesta en la entrada principal del edificio, debía llamar a su piso.

Esta semana se viralizó en redes sociales un vídeo donde Paula explicaba las situaciones incómodas que había experimentado en su edificio de Madrid con los huéspedes de estos alojamientos turísticos. Multitud de personas han compartido y comentado su testimonio, poniendo en relieve el debate sobre los derechos de los inquilinos. Víctor Rey, coordinador de la Oficina de Afectad@s por las Viviendas de Uso Turístico, afirma a Público que las garantías de los residentes son las mismas que en cualquier otro edificio, independientemente de la presencia de alquileres turísticos. "Derecho a descansar, a vivir en paz y tranquilidad y a disfrutar de unos espacios comunes que no estén deteriorados", afirma. 

En el edificio donde vive la joven, el 65% de las viviendas se destinan a uso turístico, según ha informado el miembro de la asociación vecinal. Paula denuncia que los inquilinos de Airbnb perjudican la calidad de vida de los vecinos de su edificio, fumando en los pasillos y causando molestias con sus constantes gritos. 

La joven madrileña compara la convivencia con los inquilinos de los alojamientos de Airbnb con la estancia en un hotel. Sin embargo, Rey aclara que en un hotel "tienes la ventaja de que, al presentar una queja, puedes acudir a la recepción para que resuelvan el problema, pero en este caso, nadie puede ayudarte".

Prohibir alojamientos de uso turístico

El miembro de la Asociación La Corrala explica que si al menos tres quintas partes de una junta de propietarios de un edificio se ponen de acuerdo, podrían prohibir o limitar los alojamientos turísticos. Sin embargo, indica que esta decisión no tendría carácter retroactivo, por lo que las viviendas turísticas ya registradas no se verían afectadas por la nueva normativa.

En esta situación, Rey señala que sería necesario presentar la denuncia ante la Agencia de Actividades del Ayuntamiento. No obstante, destaca que los trámites administrativos suelen ser lentos y que posteriormente se lleva a cabo un contraste entre la denuncia y la defensa de los propietarios.

Falta de inspección en Madrid

Rey revela que en el edificio de Paula hay 19 viviendas de uso turístico debidamente registradas por la Comunidad de Madrid, junto con otras seis adicionales que operan sin licencia. Además, señala que a pesar de que el Ayuntamiento de José Luis Martínez Almeida cuenta con una normativa para regular este tipo de alojamientos, asegura que no se está aplicando de manera efectiva.

Tanto Paula como Rey están de acuerdo en que en Madrid no existe una política efectiva de supervisión de derechos para los inquilinos. Según el miembro de la asociación vecinal, "pasan muchos meses para que se inspeccione un edificio debido a la falta de personal trabajando en ese control".

Víctor Rey(Asociación Vecinal La Corrala): "Lo que está pasando en Madrid con los pisos turísticos es una cuestión de voluntad política"

Paula destaca que los propietarios de los alojamientos turísticos están protegidos por la legislación vigente. Por otro lado, Rey opina que la situación con las viviendas turísticas en Madrid "es una cuestión de voluntad política, de decidir si se quiere abordar el problema o permitir que siga creciendo".

Por su parte, Airbnb ha redactado un artículo para que los anfitriones de la compañía se familiaricen con sus obligaciones, así como para ofrecerles una visión general sobre las diferentes leyes, normativas y prácticas recomendadas que correspondan en su caso. "Para formar parte de nuestra comunidad, debes respetar nuestras normas, como los estándares de hospitalidad o la Política contra la Discriminación, y asegurarte de cumplir la legislación local y otras normativas específicas según tus circunstancias y tu zona", exponen.

Precios altísimos en los alquileres 

El malestar entre los vecinos madrileños ha llevado a considerar la posibilidad de mudarse a otro edificio. Rey informa a este medio que varios residentes del edificio de Paula se pusieron en contacto con la Asociación de Vecinos La Corrala buscando asesoramiento sobre esta cuestión. "Me comentaban que encontrar una vivienda en Madrid es casi imposible a menos que estés dispuesto a pagar un dineral", añade.

El último estudio que cruza los sueldos medios de las ofertas de empleo de Infojobs y los precios medios del alquiler de Fotocasa, muestra que los inquilinos han destinado de media en España el 43% de su sueldo bruto al pago del alquiler de su vivienda, el porcentaje más alto de los últimos cinco años.

Además, según este informe, Illes Balears y Madrid encabezan la lista de comunidades autónomas en las que más sueldo bruto se dirige al pago de una vivienda en alquiler. Un 63% en el caso de Balears y un 62% en Madrid, las únicas por encima del 60%.

*Este artículo ha sido modificado para retratar con mayor claridad la versión de los testimonios.