Pese a que la cultura de viajar en autocaravana no está tan consolidada como en otros países europeos, estos últimos años hemos vivido un repunte de esta tendencia, impulsado también por los cambios en el estilo de viajar que nos ha traído la pandemia. De la autocaravana se valora su independencia, su libertad, su contacto directo con la naturaleza… y su precio. Porque pese a la subida de los carburantes, el hecho de no pagar alojamiento (o pagar poco en los campings) siempre es una ventaja.
Si eres un primerizo en esto de viajar en autocaravana, consulta estos consejos para viajar en camper —que también sirven, en su mayoría, para viajar en autocaravana— sobre todo en relación a la diferencia entre estacionar o aparcar, pernoctar y acampar para evitarte disgustos a modo de multas que te compliquen el presupuesto. También es recomendable analizar la normativa sobre los permisos de pernoctación en caravana en nuestro país y las diferencias con la acampada libre.
Cabo de Gata (Almería)
Almería es tierra prometida para autocaravaners, una de las provincias españolas en las que te encontrarás con más colegas a bordo de una casa rodante. Y es que Almería combina buena meteorología durante casi todo el año, espacios naturales fascinantes, carreteras panorámicas únicas y un ambiente distendido con aroma hippie.
Arrancando desde la playa de Salinas al oeste, bajando hasta el propio Faro del Cabo de Gata donde se encuentra el célebre Arrecife de las Sirenas, para después ir descubriendo localidades como Los Escullos, La Isleta del Moro, Las Negras o Rodalquilar, y playas maravillosas como Mónsul, Genoveses o Los Muertos, sin olvidarnos del desierto de Tabernas, ya fuera del parque natural, pero que bien merece una visita. Un viaje de ensueño en autocaravana.
Ruta del Califato (Córdoba, Jaén y Granada)
No dejamos Andalucía, pero nos vamos al interior de esta tierra divina, que también existe. La Ruta del Califato es un itinerario cultural de 180 kilómetros en el que recorrer diez siglos de historia que marcaron el devenir de al-Ándalus, desde los inicios del siglo VIII con la llegada de los musulmanes, hasta la expulsión de los moriscos a principios del XVII.
Desde Córdoba arranca este viaje, una ciudad que en torno al año 1000 fue una de las más pobladas de Occidente, pasando por localidades como Aguilar de la Frontera, Montilla, Lucena, Cabra o Priego de Córdoba, para, tras visitar Baena, pasar a Jaén conociendo Alcaudete. La Ruta del Califato termina en la Alhambra, dónde si no, tras recorrer Colomera, Güevéjar, Alfacar o Víznar en la provincia de Granada.
El Penedès (Tarragona y Barcelona)
Castillos, miradores, pueblos de cuento, playas y buen ambiente en una tierra tapizada de viñas. ¿Qué más se puede pedir? El Penedès es una región natural y un territorio histórico natural catalán entre las provincias de Tarragona y Barcelona que abarca cuatro comarcas: Anoia, Alt Penedès, el Garraf y el Baix Penedès.
Además de probar sus vinos Denominación de Origen, el Penedès comprende enclaves tan bonitos como el Castell de Castellet sobre el Pantano de Foix, las mejores vistas de la montaña de Montserrat, el delicioso Parc dels Talls con sus pequeños lagos denominados pèlags, o el icónico Castell de Subirats, terminando nuestra ruta en Sitges, que no merece presentación, ¿verdad?
La Costa Brava (Girona)
Ya que estamos en la costa catalana, miramos hacia el norte para deslumbrarnos con una de las franjas litorales más seductoras para un viaje en autocaravana. De acuerdo que algunas de sus carreteras —como la misma que lleva a Cadaqués— no son las más sencillas de la península, pero el premio merece la pena.
Entre los más de 200 kilómetros de costa entre Blanes y Portbou podemos encontrar localidades tan populares como Roses, Peratallada, Pals, Begur, Calella de Palafrugell o Tossa de Mar. Tanto donde elegir que una ruta en autocaravana por la Costa Brava puede extenderse durante varias semanas.
Desierto de los Monegros (Huesca y Zaragoza)
La costa es como un imán para nuestra autocaravana, pero al interior de España también nos esperan territorios únicos marcados por sus singularidades. Y una de las zonas más insólitas de Aragón es el desierto de los Monegros que muchos pusieron en el mapa por aquel mítico festival organizado por la no menos mítica Florida 135.
Desde Villanueva de Sigena arranca la denominada Ruta Jubierre, uno de los itinerarios más reveladores de la comarca de los Monegros en el que se divisan algunos de sus colosos pétreos más significativos como el Tozal de la Cobeta o el Tozal Solitario. Y tras pasar el vergel de Sariñena, capital de la comarca, nos dirigimos hacia Monegrillo y Farlete, recorriendo la famosa A-1104, una de las carreteras más «cinematográficas» de España.
Valle del Silencio (León)
A los pies del pico Aquiana en los montes Aquilanos y al sureste de la comarca de El Bierzo, se abre un valle de nombre seductor que atrajo en su día a misteriosos anacoretas y que hoy embruja a muchos viajeros en autocaravana que acuden a este enclave leonés en busca de un baño de bosque.
Cuentan que el eremita San Genadio, allá por el siglo X, mandó callar al río Oza porque le interrumpía en sus oraciones. Nosotros pediremos que su rumor nos conduzca hacia la iglesia de Santiago de Peñalba, una joya mozárabe única en España.
La Costa Verde (Asturias)
Volvemos a la costa para redescubrir uno de los grandes tesoros del litoral peninsular y que se presenta como otro viaje de ensueño en autocaravana. Desde Llanes a Tapia de Casariego, pasando por Ribadesella, Lastres, Villaviciosa, Gijón, Avilés, Salinas, Cudillero o Luarca, los 350 kilómetros de la costa asturiana es un paraíso azul y verde que enamora hasta en aquellos días en los que solo los surfistas más intrépidos se atreven con el Cantábrico.
No hay espacio suficiente para detallar los venerables arenales que encontrarás en tu camino. Solo un dato para ir abriendo boca: solamente el concejo de Llanes suma 30 playas. Así que no olvides el bañador… y el neopreno.
Rías Baixas (Pontevedra y A Coruña)
Y terminamos nuestra selección de las mejores rutas para viajar en autocaravana por España en el fin del mundo… en Fisterra allí donde empieza (o termina) uno de los itinerarios más asombrosos de la península. A lo largo de más de 300 kilómetros recorreremos hasta seis rías, desde Corcubión al norte hasta la Ría de Vigo al sur, pasando por Muros y Noya, Arosa, Pontevedra y Aldán.
Vertiginosos acantilados, faros sublimes y playas salvajes entre las que destaca la de Milide en Cangas do Morrazo, Montalvo o Lanzada en Sanxenxo o la playa de Vilar en Ribeira, sin olvidarnos de Rodas en las islas Cíes, un paraíso inolvidable, ya mar adentro.
