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Un 57,8% de los jóvenes españoles tiene semen de baja calidad

Reuters

Más de la mitad de los jóvenes españoles, un 57,8 por ciento, tiene semen de una calidad inferior a lo que la Organización Mundial de la Salud (OMS) considera normal, según un estudio realizado por el Instituto Marquès y publicado el jueves en la revista Andrología.

Esta investigación, que midió el volumen, la concentración y la movilidad de los espermatozoides de 1.239 jóvenes entre 18 y 30 años en las 17 comunidades autónomas, reveló que existen diferencias en la calidad del semen en las distintas zonas geográficas y que las regiones con una mayor incidencia de jóvenes con una escasa concentración de espermatozoides son la Comunidad Valencia, Cataluña y el País Vasco.

Según los expertos la concentración de células reproductoras en el semen es un factor determinante en la fertilidad y es en este ítem las regiones con mejores resultados son Madrid, seguida de Andalucía y Galicia.

"El problema se concentra especialmente en ciertas áreas geográficas con una subfertilidad entre los jóvenes, lo cual significa que tardarán más tiempo en conseguir un embarazo, dependiendo de la edad y fertilidad de su pareja", afirmó en el artículo la doctora Marisa López-Teijón, jefa del servicio de reproducción asistida del Instituto Marquès y directora de la investigación.

El factor determinante de la oligoespermia, baja concentración en el semen, según los expertos de la revista es la industrialización, que deriva en mayores niveles de contaminación ambiental, y que afecta a los hombres durante el periodo embrionario, es decir los expone a desórdenes endocrinos debido a sustancias que llegan al feto desde el cordón umbilical.

Según el doctor Manel Elbaile, especialista en reproducción asistida del Instituto Marquès, la contaminación afecta a la formación de los testículos durante la etapa embrionaria, y por lo tanto a la producción de semen, por lo que aseguró que la edad no es un factor determinante en la subfertilidad ni el consumo de drogas, tabaco, el estrés o los antecedentes de enfermedades venéreas.

"Si esta alteración se produjera después de la pubertad, habríamos visto un empeoramiento de la concentración en función de la edad, pero eso no ha sido así, lo cual apoya la hipótesis de que la afectación se produce durante el embarazo", afirmó Elbaile, coautor del estudio.

El estudio puso en el punto de mira a los disruptores endocrinos, un tipo de sustancias químicas utilizadas en la industria, que en el cuerpo humano actúan como hormonas femeninas.

Para ahondar en los descubrimientos el Instituto Marqués efectuará un seguimiento de la concentración de estos químicos durante el embarazo y la lactancia en mujeres residentes en las comunidades más afectadas por la baja concentración de espermatozoides en los jóvenes.

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