La demanda de ordenadores por parte de grandes compañías se incrementará previsiblemente a mediados de 2010 como consecuencia del lanzamiento esta semana del sistema operativo Windows 7 de Microsoft, dijo el miércoles un destacado ejecutivo de Dell.

Dell también está mirando a los sectores de prestación de servicios y software de virtualización para futuras posibilidades de adquisición, dijo a periodistas el presidente de la compañía para grandes empresas, Stephen Schuckenbrock.

"Windows 7 es el lanzamiento de producto de mejor calidad que ha hecho Microsoft en mucho tiempo", dijo Schuckenbrock. "Cuando consideras que Vista fue un descalabro, Windows 7 tiene un potencial de actualización que realmente no se ha visto nunca antes".

Microsoft lanzará su Windows 7 de próxima generación el jueves, y muchas compañías de ordenadores personales esperan que suponga un empujón a los ciclos de reposiciones corporativas y que empresas que tengan versiones más antiguas de Windows compren nuevos ordenadores y servidores.

La tercera compañía de ordenadores personales del mundo completó recientemente la adquisición del proveedor de servicios de software Perot Systems, tratando de crecer en mercados de mayores márgenes en un momento en el que los márgenes de los ordenadores son cada vez más pequeños.

La compañía continuará ampliando sus prestaciones de servicios, y seguirá abierta a oportunidades de compra para lograrlo, declaró Schuckenbrock, citando por ejemplo el sector del software de virtualización.

Dell y su rival más pequeño Lenovo registraron una caída de la venta total de ordenadores el año pasado, en gran parte debido a su dependencia del gasto corporativo, y están intentando diversificar sus actividades para detener el declive de las ventas.

Acer superó a Dell como la segunda marca de ordenadores del mundo en el tercer trimestre, dijeron las empresas de estudios de mercado IDC y Gartner este mes, gracias a su éxito en el segmento de los netbooks, que son ordenadores de bajo coste.

Schuckenbrock dijo que a Dell le preocupaba menos recuperar el segundo puesto de Acer a cualquier coste, y que estaba más interesado en tener el negocio más rentable posible.