Del mismo modo en que el comercio ha visto en las ofertas el modo de fomentar el consumo, las principales economías del mundo parecen dispuestas a afrontar la crisis a través del recorte de los tipos de interés, que rozan ya mínimos históricos y podrían, según los analistas, continuar a la baja en 2009.

Según los expertos consultados por Efe, los principales bancos centrales están intentando reactivar la economía y la escasez de crédito derivada de la crisis de las hipotecas de alto riesgo a través de una "agresiva" política monetaria de "tipos 0" con el fin de favorecer la liquidez en el mercado y acelerar, así, la huida de la recesión.

Los analistas coinciden en señalar que el Banco Central Europeo (BCE) es el organismo que más margen de maniobra tiene en este sentido, y prevén que en 2009 sitúe el precio del dinero en la Eurozona en el entorno del 1 por ciento, desde el 2,50 por ciento actual.

Según el analista de Atlas Capital Ignacio Cantos, el BCE ha mantenido un comportamiento más "conservador" respecto a las bajadas porque "aglutina a 17 intereses distintos", pero cree, sin embargo, que las rebajas efectuadas por otros bancos centrales le "arrastrarán" hacia nuevos recortes.

En este sentido, esta misma semana la Reserva Federal de EEUU (Fed) decidió dejar los tipos de interés de referencia entre el 0 y el 0,25 por ciento, lo que los coloca en mínimos históricos y agota el margen de maniobra para nuevos recortes.

También esta semana el Banco de Japón rebajó los tipos hasta el 0,1 por ciento para estimular la economía nacional, y el Banco Central Noruego hizo lo propio y los redujo 1,75 puntos, hasta el 3 por ciento.

Desde Capital Markets no esperan que la zona del euro llegue a estos niveles y aseguran que "muy mal tendría que pintar la economía" para que el BCE, que "siempre está muy encima del control de la inflación", tomara una decisión tan radical.

No obstante, los analistas consideran que el organismo que preside Jean Claude Trichet efectuará una bajada de entre 0,75 y 1 punto en la reunión que mantendrá el próximo 15 de enero.

Con la moderación del precio del crudo, que ha caído más de 100 dólares desde julio, y la consecuente relajación de las presiones inflacionistas, el BCE ha efectuado tres recortes de tipos consecutivos en los tres últimos meses del año, hasta dejar el precio del dinero en la tasa más baja desde mayo de 2006.

Tras la última reunión del organismo, sin embargo, Trichet apeló a la necesidad de que estas medidas se trasladen a la economía real y dejó entrever la posibilidad de que hasta que esto no se produzca no habría nuevos recortes.