Esta semana, concretamente el jueves, será la cuarta vez que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, pronuncie un discurso ante la Asamblea General de la ONU. El jefe del Ejecutivo ha viajado este lunes a Nueva York con una apretada agenda que incluye las habituales intervenciones de los líderes internacionales. En todas las realizadas por Sánchez hasta el momento se han incluido referencias a un conflicto en el que las Naciones Unidas tiene un papel relevante: el Sáhara Occidental. La inclusión del derecho a la libre determinación del pueblo saharaui se incluyó en 2018 pero el actual mandatario lo eliminó los años siguientes. 

La decisión tomada por Sánchez el pasado marzo de enviar una carta al rey Mohamed VI reconociendo su propuesta de autonomía sobre el Sáhara como "la opción más seria, realista y creíble", revolvió el panorama político y el contexto internacional. Argelia y el Frente Polisario tensaron las relaciones bilaterales y todo el arco político criticó con dureza ese giro histórico respecto a la antigua colonia española. 

La tensión sigue latente, especialmente con Argelia, con el gas o las relaciones comerciales como telón de fondo. El presidente hizo un guiño diplomático a los argelinos desde Berlín hace unos días pero nada ha avanzado. Y en una entrevista realizada la semana pasada en Canal 24 Horas de TVE reconocía que había una "discordia" con este país debido al Sáhara Occidental. 

El discurso de Sánchez llegará en un momento de máxima expectación sobre el conflicto. El enviado especial de la ONU, Stefan De Mistura, ha viajado recientemente a los territorios saharauis, argelino y marroquí aunque las negociaciones entre Marruecos y el Frente Polisario, representante legítimo del pueblo saharaui ante Naciones Unidas, siguen bloqueadas. Desde Moncloa y el Ministerio de Exteriores se han afanado durante estos meses en transmitir la importancia del papel de la ONU para la resolución del conflicto. 

"Nos preocupan las crisis que todavía subsisten, como la del Sahara Occidental,
que nos es tan próxima. España defiende la centralidad de las Naciones Unidas y desea contribuir a los esfuerzos del Secretario General de Naciones Unidas y de su Enviado Personal para alcanzar una solución política, justa y duradera y mutuamente aceptable, que prevea la libre determinación del pueblo del
Sahara Occidental en el marco de las disposiciones conformes a los principios y propósitos de la Carta de las Naciones Unidas", dijo Sánchez en 2018 durante el debate del 73º período de sesiones de la Asamblea General de la ONU.  

En cambio, en 2019 eliminó la referencia a la libre determinación del pueblo saharaui. "La situación en el Sahara occidental también está en la Agenda. Como Gobierno de España defendemos la centralidad de Naciones Unidas y deseamos contribuir a los esfuerzos del Secretario General para alcanzar, como establece las resoluciones del Consejo de Seguridad, una solución política justa, duradera y mutuamente aceptable en el marco de los principios y los propósitos de la Carta de Naciones Unidas", destacó entonces. 

Las referencias al Sáhara en los años 2020 y 2021, fueron similares. "Es necesario alcanzar una solución política justa, duradera y mutuamente aceptable al conflicto del Sáhara Occidental, tal y como establecen las resoluciones del
Consejo de Seguridad y en el marco de disposiciones conformes a los principios, a los propósitos de la Carta de Naciones Unidas", dijo hace dos años en una asamblea celebrada de forma virtual por la pandemia. 

"Es necesario alcanzar una solución política, que tiene que ser justa, duradera y mutuamente aceptable sobre el Sahara Occidental, tal como establecen las resoluciones del Consejo de Seguridad. España sigue defendiendo la centralidad de Naciones Unidas, apoyamos los esfuerzos del Secretario General", dijo el pasado año, meses antes de la carta enviada el monarca de Marruecos. El rey Felipe VI también mencionó la libre determinación en un discurso ante la ONU en 2016. 

La exclusión de la referencia a la "libre determinación" no es un asunto menor. Hasta el año 2019 los programas electorales incluían esas referencias. Pero en el pasado 40º Congreso Federal, celebrado en Valencia en octubre de 2021 se excluía ese derecho, que tiene décadas de historia. 

Fue la propia Asamblea de las Naciones Unidas, en 1960, la que estableció que "todos los pueblos tienen el derecho de libre determinación; en virtud de este derecho, determinan libremente su condición política y persiguen libremente su desarrollo económico, social y cultural".

En su última resolución, firmada en octubre del pasado año, la 2602, el Consejo de Seguridad de la ONU sí vuelve a recoger la libre determinación eliminada de los discursos de Sánchez, del PSOE y de los diferentes integrantes del Gobierno. "Reafirmando su compromiso de ayudar a las partes a alcanzar una solución política justa, duradera y aceptable para todas ellas, basada en la avenencia, que prevea la libre determinación del pueblo del Sáhara Occidental en el marco de disposiciones conformes a los principios y propósitos de la Carta de las Naciones Unidas, y haciendo notar la función y las responsabilidades de las partes a este respecto". 

A estas resolución precisamente apelaron desde la dirección socialista y desde Moncloa para apelar su posición. En ella, sobre el plan de autonomía se limitan a decir que "acogen con beneplácito los esfuerzos serios y creíbles de
Marruecos por hacer avanzar el proceso hacia una solución", aunque sin mencionar específicamente su plan y añadiendo que también han tomado nota de la propuesta del Frente Polisario.