Las exportaciones de armamento seguirán disfrutando de un amplio margen de confidencialidad. La secretaria de Estado de Comercio, Xiana Méndez, ha afirmado ante la Comisión de Defensa del Congreso que el secretismo en torno a las actuaciones de la Junta Interministerial que analiza esas operaciones se mantendrá, básicamente, por razones de "seguridad nacional".

Méndez ha acudido por cuarta vez a dicha comisión para presentar los datos correspondientes a las exportaciones de material militar registradas en 2021. Al igual que en las tres ocasiones anteriores, la funcionaria no se salió ni un milímetro del guion, que podría resumirse en una frase: España le vende armas a Arabia Saudí porque sabe que no se usan para violar los derechos humanos, pero sin explicar cuáles son los fundamentos de tal convencimiento. 

Las operaciones con Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos volvieron a estar presentes en las preguntas formuladas por Marta Rosique (ERC) y Jon Iñarritu (EH Bildu), quienes recordaron a Méndez que ambas dictaduras absolutistas llevan inmersas en una campaña de ataques contra Yemen desde marzo de 2015.

Lejos de provocar una revisión en la política española de exportación de armas, la guerra librada por la coalición árabe en territorio yemení ha estado acompañada de un sólido incremento en la venta de material militar a las Fuerzas Armadas saudíes y emiratíes.

En 2021, el Gobierno autorizó 20 licencias de exportación de material de defensa a Arabia Saudí por un valor de 85,6 millones de euros en concepto de munición, sistemas de dirección de tiro, bombas, cohetes o misiles. En el caso de Emiratos, el año pasado se autorizaron 33 exportaciones de productos similares por un valor superior a los 120,5 millones de euros. 

"En estos momentos no existe ningún embargo contra la exportación de armas a Arabia ni Emiratos", defendió Méndez durante su comparecencia de este miércoles en la Comisión de Defensa. Allí remarcó que "en ningún caso España incumple la legislación ni los compromisos internacionales", al tiempo que negó que la coalición árabe haya empleado armamento español en los ataques contra Yemen pese a que distintos informes señalan precisamente lo contrario.

Las peticiones de transparencia y fin de secretismo formuladas por ERC y EH Bildu volvieron a caer en saco roto. "Pocas cosas son más obvias que puedan afectar la seguridad nacional como las actas de la JIMDDU", afirmó la secretaria de Estado en alusión a los acuerdos de las reuniones de la Junta Interministerial para el Comercio y Control del Material de Defensa y Tecnologías de Doble Uso, el organismo que concede las licencias de exportación de armamento. 

Las actas de la JIMDDU gozan de carácter secreto gracias a la resolución adoptada en febrero de 1987 por el Gobierno de Felipe González bajo el amparo de la Ley de Secretos Oficiales de la dictadura franquista. Poco antes, el Ejecutivo del PSOE había autorizado una serie de exportaciones de material  militar a la dictadura chilena de Augusto Pinochet.

Secretos oficiales

"Hasta donde yo sé no hay intención de desclasificar nada", dijo Méndez ante las preguntas de Rosique e Iñarritu. En esa línea, defendió las reiteradas negativas del Gobierno a proporcionar información de este tipo, ya sea en sede parlamentaria o a través de peticiones realizadas a través del Consejo de Transparencia. "Mientras exista la Ley de Secretos Oficiales, la cumpliremos a rajatabla", afirmó. 

En su comparecencia, la secretaria de Estado de Comercio indicó que se ha decidido aplicar el mecanismo de verificación ex-post de venta de armamento a dos exportaciones realizadas a Arabia Saudí y otras dos con destino a Emiratos. Los resultados de esas inspecciones, que se realizan con el consentimiento de los países compradores, gozarán igualmente de carácter reservado.