La violencia machista ha oscurecido el comienzo del verano. En julio, cuatro mujeres han sido asesinadas en cinco días por sus parejas o exparejas. En lo que va de año, las cifras oficiales registran 24 mujeres asesinadas en España por este mismo motivo. Desde 2003, cuando empezó a contabilizarse oficialmente, son ya 1.209.

La ola de violencia machista lanza alertas en el colectivo feminista y en el Gobierno a través del Ministerio de Igualdad. Sin embargo, Vox hace valer su fuerza ante el PP en los municipios y comunidades donde forma parte del Ejecutivo con los populares.

Y en medio de esta cadena de asesinatos machistas, la ultraderecha cuestiona la violencia de género, se niega a manifestarse contra esta lacra por cada víctima y acaba con iniciativas para luchar y evitar más atentados contras las mujeres.

Por ahora, todos los presuntos culpables de los asesinatos han sido detenidos. El sábado 1 de junio, en Pamplona, un hombre de 51 años se entregó a la Policía Municipal y confesó que había asesinado a su pareja, una mujer de 47 años y madre de tres hijos, en el bar donde ambos trabajaban.

El domingo 2, agentes de los Mossos d'Esquadra detuvieron a otro en Salou como presunto autor del asesinato de la que también era su pareja en un hotel del municipio tarraconense.

El lunes, en un goteo que resultaba ya aterrador, un hombre en Alcalá de Henares confesó a la Policía haber estrangulado a una mujer que creía que estaba muerta y de quien dijo que era "amiga". La víctima fue encontrada en el suelo con heridas en el cuello. El detenido por estos hechos tiene 25 años y la víctima, 53.

El miércoles, una mujer de 36 años fue asesinada en su vivienda en Móstoles por su expareja de 46 años, que acabó con su vida con dos puñaladas mortales, una en el pecho y otra en el cuello. La mujer lo había denunciado hacía un mes por sus amenazas y el hombre, ya detenido, tenía antecedentes por malos tratos.

Este sábado la Policía detenía en Logroño a un hombre que asesinó a su mujer y que intentaba ahogar a sus dos hijos en el río Ebro. De hecho, fue uno de los menores el que consiguió huir y alertar a las autoridades de lo que su padre había hecho y pretendía hacer con los niños. 

La tradición, rota por los nuevos gobiernos municipales

Por toda respuesta, los nuevos gobiernos municipales formados por el PP y Vox han roto con la tradición de celebrar un minuto de silencio en homenaje a las víctimas por violencia machista en las localidades madrileñas de Móstoles y Alcalá de Henares. En su lugar, este minuto se ha celebrado en contra de "la violencia familiar".

Los expertos definen a la agrupación de tres a cinco feminicidios seguidos en un periodo de dos a cinco días como clúster. España no ha vivido demasiados periodos así. Los últimos que se recuerdan datan de febrero del 2017, septiembre de 2018, mayo de 2021 y diciembre de 2022, cuando ocho mujeres fueron asesinadas.

Aunque nada justifica estos crímenes, los expertos han podido identificar que en momentos en los que más se intensifican las relaciones sociales como pueden ser en vacaciones de verano se produce un aumento de la violencia machista.

Además, las olas de calor incrementan el riesgo de sufrir violencia por parte de la pareja, según un informe del Centro Nacional para la Información Biotecnológica (NCBI).

Las cifras dan la razón por ahora a estos planteamientos, pues el mes de julio es, sin duda, el más sangriento en cuanto a violencia machista. En este mes, 119 mujeres han sido asesinadas. por sus parejas o exparejas desde 2003, cuando comenzó la estadística. Le sigue enero con 110.

La delegada del Gobierno contra la violencia de género, Victoria Rosell, ha encendido también la voz de alarma sobre esta cuestión: "Hay que estar especialmente alerta en los días festivos, ya que anualmente desde 2003 destacan los meses de julio, agosto y junio, y diciembre y enero por otro lado, de una manera muy evidente".

"Los domingos y los días festivos, en general, son periodos de mayor convivencia. Son días en los que los vecinos y toda la sociedad tienen un papel que cumplir", ha añadido.

El exdelegado del Gobierno contra la violencia de género y experto Miguel Lorente ha explicado que estos factores aumentan las posibilidades, aunque no traen consigo certezas.

"¿Que llueva significa necesariamente que tenga que haber más accidentes? No. Significa que se dan condiciones que hacen más posibles los accidentes, lo que quiere decir que hay que elevar la precaución".

La derecha y los puntos violeta

Pero la política sigue su curso, y con las elecciones del 23 de julio en el horizonte hay ayuntamientos como el de Torrelodones, en Madrid, gobernado por una coalición entre PP y Vox que, en su afán por marcar agenda, han anunciado la eliminación de los puntos violeta contra la violencia sexual de las fiestas patronales, que se celebrarán en julio y en agosto.

La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha criticado esta medida: "Las políticas contra las violencias machistas y los puntos violetas salvan vidas. Eliminarlos es poner en riesgo la libertad y la seguridad de las mujeres. Es una grave irresponsabilidad. Las instituciones tienen la obligación de garantizar nuestros derechos", ha escrito en su cuenta de Twitter.

Los puntos violetas contribuyen, entre otras muchas cosas, a que las mujeres denuncien más. En el primer trimestre de 2023 el número de mujeres víctimas de violencia machista ascendió a 45.154, un 11,54% más que en el mismo periodo de hace un año.

También se registraron 46.327 denuncias, un 10,92% más, según los datos hechos públicos este miércoles por el Consejo General del Poder Judicial.

La presidenta del Observatorio contra la violencia machista, Ángela Carmona, ve positivos los datos porque muestran que las mujeres no se están quedando calladas. Por otra parte, estos revelan que la violencia de género en España sigue bien vigente y que sigue asesinando mujeres.

Para animar a que todavía más mujeres denuncien, existe una guía de recursos para acompañar a una mujer víctima de violencia machista elaborada por el Gobierno. Además, se puede llamar al 016: no deja rastro y funciona todos los días durante 24 horas y en 53 idiomas.

"El objetivo es que ninguna mujer se sienta sola. Todas podemos hacer algo frente a la violencia machista", ha asegurado Montero.

Pero no todo el mundo parece convencido de ello. Aprovechando la semana del Orgullo LGTBI+, la semana pasada hubo quien pensó que era un buen momento para vandalizar el mural feminista del Espacio de Igualdad María de Maeztu, ubicado en el madrileño barrio de la Latina.

De un día para otro, este apareció con mensajes de odio hacia la mujer y con insultos hacia la ministra de Igualdad: "Irene Montero puta" y "Viva el hombre hetero", se podía leer. El mural rinde homenaje a 10 mujeres juristas y fue inaugurado hace tres meses por la exvicealcaldesa de Madrid Begoña Villacís.

La fundadora de Femen en España, Lara Alcázar, explica que existe cierto sentimiento de impunidad entre ciertos hombres que se sienten amenazados por las recientes olas de feminismo. "Es importante reforzar un discurso social donde las mujeres sean vistas como sujetos y no como objetos. Debemos abordar el tema de la violencia machista como una emergencia social", argumenta.