Bélgica propone a los trabajadores concentrar la misma jornada laboral en cuatro días

El Gobierno belga llegó este martes a un acuerdo para reformar su mercado laboral e incorpora un elemento que comienza a estar en la agenda de varios países del mundo, la semana laboral de cuatro días. En concreto, el acuerdo del Ejecutivo del primer ministro belga, Alexander De Croo, incorpora la posibilidad de concentrar la semana de trabajo en cuatro días o flexibilizar los horarios para "dar más libertad a los trabajadores".

Sin embargo, esto no supone que se reduzca las horas de trabajo para poder trabajar cuatro días y descansar tres a la semana. Lo que se pretende es que los trabajadores belgas decidan si quieren concentrar el total de horas que deben trabajar a la semana en sólo cuatro días, lo que aumentaría su jornada diaria.

Así lo ha aclarado en un tuit el líder de Más País, Íñigo Errejón, que abandera en España la lucha por implantar la semana laboral de cuatro días pero reduciendo las horas que un trabajador debe realizar.

Precisamente, Más País logró a finales del año pasado un acuerdo con el Gobierno para comenzar a implantar en España esta semana labora de cuatro días a cambio de su apoyo a los Presupuestos Generales del Estado de 2022. a través de los 

En otros países del mundo, como es el caso de Nueva Zelanda, Japón, Islandia o Suecia, ya hay numerosas empresas que aplican esta semana laboral a sus trabajadores. Sin embargo, el acuerdo en Bélgica va por otro camino.

El acuerdo persigue el objetivo de flexibilizar el mercado de trabajo para que Bélgica llegue a una tasa de empleo del 80 % de aquí a 2030

El comité ministerial que reúne al primer ministro belga, Alexander De Croo, y a sus vice primeros ministros alcanzó esta madrugada el acuerdo, que persigue el objetivo de flexibilizar el mercado de trabajo para que Bélgica llegue a una tasa de empleo del 80 % de aquí a 2030. Actualmente, la tasa de empleo se sitúa en el 71 % en Bélgica, con fuertes disparidades regionales, indicó la cadena pública RTBF.

De Croo explicó en una rueda de prensa que han tenido en cuenta las lecciones aprendidas durante la pandemia, en la que el teletrabajo ha sido obligatorio o ha estado fuertemente recomendado y ha llevado a los empleados a nuevas situaciones de conciliación.

El vice primer ministro y titular de Economía y Empleo, el socialista francófono Pierre-Yves Dermagne, indicó en su perfil en Twitter que el pacto contiene "avances concretos para todos los trabajadores".

En concreto, señaló que se refuerza el derecho a la formación, se protege mejor a los trabajadores de plataformas digitales (como Uber), se dan más garantías para conciliar la vida profesional y familiar y se impulsa el empleo.

Varias medidas para favorecer la conciliación

Una de las principales medidas que contempla el acuerdo es que los trabajadores puedan elegir la posibilidad de concentrar su horario laboral en cuatro días a la semana, de manera que podrían disfrutar al quinto de una jornada libre.

Los empleados podrán optar también por un régimen semanal variable, trabajando más horas una semana y teniendo más tiempo libre a la siguiente.

El pacto prevé facilitar a las empresas de comercio electrónico el empleo vespertino, para proteger mejor a los trabajadores de plataformas como Uber o Deliveroo

En ambos casos, es el empleado el que tiene que solicitar esas fórmulas de trabajo, que la prensa belga destaca como "interesante en las situaciones de coparentalidad". Además, los trabajadores con horarios variables deberán conocer su horario al menos siete días antes.

Por otra parte, el pacto prevé facilitar a las empresas de comercio electrónico el empleo vespertino (entre las 20.00 horas y la medianoche), para proteger mejor a los trabajadores de plataformas como Uber o Deliveroo.

Las personas que hayan dado o recibido un aviso de despido podrán, además, empezar a trabajar para otra empresa durante ese periodo. Cada año, las empresas deberán también presentar un plan de formación de sus empleados, explicó el Gobierno belga.

Otro aspecto del acuerdo es la extensión del derecho a la desconexión fuera del horario laboral, de manera que los empleados no tengan "presión por responder a mensajes o correos electrónicos".