Así es, paso a paso, el sistema de detección precoz del cáncer que ha fallado en Andalucía
No existe una explicación completa y comprensible de dónde ha estado el fallo que ha provocado el escándalo de los cribados de las mamografías.

Sevilla--Actualizado a
El estratégico programa de cribado del cáncer de mama que ha fallado en la Comunidad Autónoma se aplica en Andalucía desde el año 1995. La idea es que dé un servicio a todas las mujeres sanas entre 50 y 69 años —progresivamente se están ampliando las edades por encima y por abajo hasta los 48 y los 71—, con la idea de detectar a tiempo un tumor, una cuestión clave que mejora el pronostico y aumentar la supervivencia. Básicamente, consiste en la realización de mamografías cada dos años a las mujeres andaluzas en esa franja de edad, según el Servicio Andaluz de Salud (SAS).
¿Qué es lo que ha fallado exactamente en este programa para que al menos 2.000 mujeres con diagnósticos no concluyentes no fueran avisadas? Según han recopilado asociaciones de mujeres como AMAMA Sevilla, ha desembocado en que varias de ellas, en una cifra aún sin determinar, hayan desarrollado el tumor.
Tanto el presidente andaluz, Juan Manuel Moreno Bonilla (PP), como el nuevo consejero de Sanidad, Antonio Sanz, han hablado de fallos en la "comunicación" a las afectadas y han centrado el problema en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla. De él proceden el 90% de los retrasos, según los datos de la Junta. Tanto el hospital como la Junta pretenden que el día 30 de noviembre este programa haya retornado a la normalidad.
Sobre si la cifra de 2.000 afectadas es la correcta, Sanz manifestó este miércoles: "El perímetro es el que es y era el que era. Si el presidente y yo actuamos con responsabilidad vamos a seguir investigando, buscando cualquier caso que no hayamos detectado. Mi preocupación es detectar, controlar y advertir ante cualquier caso". Las mareas aseguran que en Salud eran muy conscientes de los problemas: "En 2023, AMAMA adviertió a la consejera de que no se recibían informes. Ninguna acción. [También] se informa que en Andalucía el cáncer de mama es mucho más prevalente que la media estatal. Ninguna reacción". Moreno aseguró haberse enterado hace días y cuando cesó a la consejera Rocío Hernández dijo: "Resulta comprensible que en un sistema tan complejo es haya errores, incidencias. Lo difícil de entender es que hayan tenido que ser las afectadas las que adviertan del problema".
Sin embargo, a día de hoy no existe una explicación completa y comprensible de lo que ha sucedido, de dónde ha estado exactamente el fallo o los fallos, que han provocado el escándalo. Moreno sí ha apuntado a más ceses en el Hospital Virgen del Rocío. Sanz ha evitado por ahora tomar esas decisiones, pero sí dijo este miércoles en una rueda de prensa que habían "existido fallos más allá de lo que es la información en plazos, como es la propia estructura y organización del Virgen del Rocío".
Las medidas anunciadas por el Gobierno andaluz para corregir el rumbo también dan pistas de lo que ha podido suceder. Estas van fundamentalmente en tres direcciones: por un lado, la idea es contratar más personal, no solo radiólogos, sino también técnicos y administrativos —"no podemos renunciar a ningún profesional", dijo Sanz—; por otro lado, plantear mejoras y desarrollo de programas informáticos —"hay que mejorar a través de las nuevas tecnologías", dijo el consejero— , y por último, una mejor coordinación de equipos y mayor control de lo que se hace. Es decir, a la inversa, se puede interpretar que el Gobierno andaluz asume que la plantilla no era la adecuada; que los programas informáticos no estaban ajustados o eran mejorables, como mínimo, en su eficacia, y que la coordinación entre hospitales y distritos sanitarios tampoco ha sido la correcta.
"El fallo ha sido una comunicación dentro del cribado. […] Puntualmente ha fallado la información a las usuarias, hacia las mujeres que se habían hecho la prueba diagnóstica y no era concluyente. Tendrían que haber sido informadas de esto y haberle dado una cita para la segunda mamografía o prueba", resumió Moreno Bonilla en una entrevista este fin de semana.
Lo que sigue es, en cinco pasos, una explicación detallada del funcionamiento del programa de cribado, hasta dónde ha podido recabar Público, tras consultar con Sanidad, expertos, sindicatos sanitarios y las mareas.
Paso 1. Comunicación del programa
El programa de cribados arranca con el envío de una comunicación, habitualmente por carta, a las mujeres cuando cumplen 50 años —la Junta trabaja en ampliarlo a mayores franjas de edad—. Si alguna mujer no ha recibido la misiva, "puede dirigirse telefónicamente a su Distrito de Atención Primaria o Área de Gestión Sanitaria donde le facilitarán la cita, o bien a su médico de familia", según el SAS. "Estos programas de cribado necesitan estar por encima del 75-80% para ser eficientes, si no es así, es un despilfarro de dineros públicos", señalan en la coordinadora de mareas blancas.
Este programa incide justamente en eso: "El cáncer de mama es el tumor maligno más frecuente en las mujeres andaluzas, al igual que sucede en el resto de España y Europa. Con los conocimientos disponibles en la actualidad no es posible llevar a cabo medidas para evitar que la enfermedad aparezca, pero afortunadamente es posible detectarla en fases tempranas cuando aún no ha producido síntomas y aplicando el tratamiento adecuado, conseguir mejorar el pronóstico aumentando la supervivencia".
"La detección precoz permite realizar en la mayoría de los casos cirugía más conservadora y menos mutilante. La forma más eficaz de detectar precozmente el cáncer de mama es realizar mamografías periódicas a mujeres de una determinada franja de edad, en las que aún no se han presentado síntomas". "Por cada 400 mujeres examinadas periódicamente durante 10 años, se evita una muerte por cáncer de mama". En el año 2023, según el Gobierno andaluz, "se cribaron (con mamografía realizada) 368.562 mujeres" y se detectaron "1.182 cánceres".
Entre las medidas anunciadas por Sanz está la siguiente: "Se va a actualizar el contenido de las cartas de invitación que se envían a los ciudadanos que conforman el grupo diana de cada uno de los cribados con una información clara, comprensible y que motive a la participación; se van a enviar recordatorios a los profesionales sobre la importancia del acompañamiento informativo y la comunicación proactiva en todas las fases del proceso; reforzar los protocolos de comunicación con Salud Responde e incluir la comunicación asistencial en las sesiones formativas periódicas, sensibilizando a los profesionales sobre su impacto en la confianza y la adherencia al programa; y a hacer una monitorización del proceso informativo para detectar posibles demoras o pérdidas de seguimiento derivadas de falta de información o comprensión insuficiente".
De esta forma, se espera "disponer de información actualizada y precisa del estado de cada paciente en todo momento, desde que recibe la carta o mensaje hasta que tiene un diagnóstico, y consolidar un modelo de atención más cercano, claro y participativo, reforzando la confianza de la ciudadanía en los programas de cribados y mejorando su eficacia global".
Paso 2. Mensaje/comunicación y cita para mamografia.
El sistema, después envía un SMS a las usuarias y les ofrece una cita. El mensaje, según uno de ellos al que ha tenido acceso Público, dice así: "CRIBADO CÁNCER DE MAMA: (nombre de la usuaria) tiene cita el (fecha de la cita) en Unidad Mama (en este caso es un centro de salud). Confirme asistencia respondiendo SI/NO al SMS".
Según CCOO, no se puede saber si este mensaje se envía a todas las mujeres o no, porque la Junta no da esos datos. Este periódico ha tenido conocimiento de un caso de una mujer que ya ha cumplido los 50 años, con quien el SAS, asegura, no ha contactado. Otras fuentes bien conocedoras de cómo funciona el sistema público afirman: "Hay mujeres que tienen 52, 53 años y no las han llamado aún. Lo digo porque cuando se plantean aumentar el intervalo de edad, primero deberían cumplir con las que actualmente les toca".
Parte de las mamografías están externalizadas desde el año 2003, según la fecha que indicaron las mareas a Público. El último contrato con una empresa privada lo firmó el Gobierno de Moreno y funciona desde hace cinco años. Sanidad se gasta algo más de un millón de euros cada año en el pago a una compañía de Granada. En principio, según el SAS, la idea es que un camión dé servicio, haga las mamografías en localidades donde no llega el sistema público, aunque también, según señala UGT a Público, se ubica de forma habitual en las ciudades, entre ellas Sevilla, ante la falta de medios propios del SAS. ElDiario.es ha documentado tres de estos casos.
Las mareas añaden a Público lo siguiente al respecto de la externalización. Por un lado, "con la furgoneta privada solo puedes acudir en la mañana que está en tu pueblo: en consecuencia, se pierden muchas mujeres y el programa no es eficiente", argumentan en las mareas. Y por otro, "el protocolo SAS obliga a respuestas en pocos días y así evitamos diagnósticos tardíos. En la privatizada no hay protocolo con tiempos obligados". Y, por último: "El deterioro de los servicios de radiodiagnósticos públicos es evidente. Además [a los médicos] se les permite trabajar en la pública y en la privada. Desde hace dos, tres años las derivaciones a la privada de pruebas de radiología son automáticas. No hay dudas".
Paso 3. Los radiólogos estudian la mamografía
Una vez efectuada en una "unidad de exploración mamográfica específica en donde se hacen dos placas por mama (doble proyección)", estas "son estudiadas por dos radiólogos distintos (doble lectura)", según el SAS.
Aquí empieza parte del problema. Según las mareas, "las mamografías se acumulan en los servicios de radiodiagnósticos de cada hospital público de referencia". "Cada hospital gestiona su situación. El deterioro consiste en eso: no responder a tiempos adecuados: esperas sanitarias, que son fenómenos progresivamente tolerados", agregan. "En el caso de que se haya hecho en el SAS el propio radiólogo está presente en muchos casos, pero si no está, se le envía, claro está. Es más, las imágenes ya no necesitan transporte en placas físicas sino que se ven en la pantalla directamente. O sea que el radiólogo las puede ver y diagnosticar en cuanto pueda y quiera", afirman en las mareas.
El sindicato de Técnicos Superiores de Imagen para el Diagnóstico y Medicina Nuclear, que agrupa a los profesionales acreditados para hacer mamografías, envió este martes una queja al presidente de la Junta. En ella, exponían que "eran conocedores de los fallos del sistema ante los oídos sordos de las Gerencias y del propio SAS".
Añaden que los problemas no solo existían en el Virgen del Rocío, donde no hay, aseguran, "dotación de personal técnico, derivándose estas pruebas a las privadas", sino que también, por ejemplo, había "salas de mamografías cerradas en turno de tarde, sin personal técnico, en distrito costa de Huelva, dependiente del Hospital Infanta Elena, que carecía de estos profesionales".
Apuntan, además, a que "otra de las causas" del retraso en la entrega de los diagnósticos "se debe a la digitalización del proceso de seguimiento". Así lo exponen: "Desde hace años se empezó a eliminar todo informe o documento interno en papel, lo cual supuso un falló del sistema. Estos profesionales técnicos, junto con la falta de radiólogos, llevaba consigo a colapsar supuestamente la nube donde se alojan los citados informes técnicos que, ante la falta de salida de informes por los radiólogos, NO PERMITIA LA SUBIDA DE MÁS INFORMES TÉCNICOS [sic, en mayúsculas], siendo una de las causas que ha dado lugar a este fallo del sistema sanitario, y que nos ha sido imposible de tratar directamente con la administración".
El consejero Sanz dijo al respecto este martes en rueda de prensa: "Actualmente los cribados se apoyan en sistemas de información diversos. Hoy cuando una persona participa en un cribado la información pasa por distintos sistemas que no siempre están suficientemente bien conectados. El salto cualitativo va a venir de la orquestación de procesos, a través de la IA, que nos van a permitir una gestión integral y monitorizada de principio a fin. En esta línea de mejora de la comunicacion con la ciudadanía, vamos a comenzar desde ya, con mecanismos de supervisión, coordinación y evaluación. Vamos a asegurarnos que se aplican de forma correcta".
Sanz añadió: "[El sistema] no es perfecto. Lo que sí quiero decir es que es importante que cuando se detecta que ha podido haber errores y en este caso han existido fallos más allá de lo que es la información en plazos, como es la propia estructura y organización del Virgen del Rocío. Las magnitudes del resto de hospitales no son comparables. Sí existen medidas que hay que tomar, desde el punto de vista organizativo, [pero] con una hora que llevo de consejero, [permitirán que] no les indique medidas. Sobre errores o funcionamiento, me queda ahondar, analizar en profundidad y con todos los datos".
"La Junta de Andalucía —agregó Sanz— implantará un sistema de automatización inteligente (Intelligent Process Automation, IPA), que permitirá evolucionar hacia una gestión integral y monitorizada de principio a fin, integrando todos los ámbitos relacionados con el proceso, desde la identificación de la población diana hasta la confirmación diagnóstica. La implantación de este modelo, que supone una inversión de 10,4 millones de euros con financiación parcial de fondos europeos, se hará de forma progresiva".
Paso 4. Diagnóstico y comunicación a las afectadas
Una vez que los especialistas han estudiado las mamografías, emiten su diagnóstico. "Cuando el radiólogo informa la prueba, la escribe en el Diraya, el programa sanitario que incluye todas las historias clínicas de todos los andaluces y que pueden consultar todos los médicos/as andaluzas. Si no está el informe del radiólogo en Diraya es que está pendiente de informe. Este hecho que era de días, con el actual deterioro puede durar meses", afirman las mareas.
"Estas plantillas están recortadas desde hace años: no se cubren las jubilaciones, las bajas de larga duración, las vacaciones veraniegas, etc. Además de este hecho, que deteriora el rendimiento de los servicios de radiodiagnósticos de forma considerable (cada vez se hacen más pruebas de forma automática en la privada), el gobierno permite que dichos radiólogos trabajen en la pública y en la privada, lo que supone en claro riesgo de perversión y desde luego existen conflictos de intereses", insisten las mareas.
En sus planes para corregir el rumbo y devolver la confianza al sistema, el Gobierno andaluz tiene prevista la contratación de decenas de radiólogos. Sin embargo, de momento, no los está encontrando. "Tenemos que hacer atractivo el sistema andaluz. Cuesta mucho dinero formar a profesionales sanitarios. Cuesta mucho formar a un profesional. Sí tendremos que tomar medidas para que los MIR se queden y hacer atractiva [la sanidad, para] que la gente que salió, vuelva. No es solo cuestión de dinero, pero es necesario incentivar", dijo el consejero Sanz.
Una vez que hay un diagnóstico es el momento de informar. El procedimiento es por carta, según asegura el Servicio Andaluz de Salud, y confirman a Público usuarias del programa: "El resultado lo recibe la interesada por correo y en el caso de que deba ser derivada al hospital para completar el estudio o para realizar algún tipo de tratamiento también recibirá dicha cita por correo. Si todo [está] ok, está automatizado el sistema para que llegue la carta a la mujer a través del distrito de Atención Primaria".
La anterior consejera de Salud, la defenestrada Rocío Hernández, explicó, cuando empezaron a conocerse los casos de retrasos en los diagnósticos, en un comunicado oficial lo siguiente: "Cuando se realiza una mamografía a una mujer existen tres posibles diagnósticos: negativo, positivo y lesión posiblemente benigna".
"En el caso —expuso la Junta— de diagnósticos negativos, las pacientes son informadas del resultado; en el caso de diagnósticos positivos, las mujeres son igualmente informadas y derivadas para nuevos procedimientos pero, en los casos en los que se detectan lesiones posiblemente benignas las mujeres pueden no haber sido informadas de que su caso sigue un procedimiento clínico con supervisión médica".
"En estos casos —según el comunicado de Salud—, hasta tres radiólogos analizan las imágenes y, en función de los factores de riesgo de cada paciente, deciden el tiempo que ha de transcurrir para la segunda prueba. Las pacientes, que viven ajenas a estas circunstancias, reciben al cabo de meses o de un año una llamada que no esperan para esa segunda cita, fijada por el radiólogo, y sienten alarma, intranquilidad y angustia".
El Gobierno andaluz, sobre este asunto de la comunicación, ha anunciado también mejoras: "En esta línea de mejora de la comunicación con la ciudadanía, destaca el refuerzo del papel operativo de los referentes locales y provinciales desde el mes de noviembre, que deberán emitir informes periódicos con los que poder identificar de forma temprana los puntos de mejora y garantizar la continuidad asistencial, de modo que se evite que las personas participantes queden fuera del circuito de atención previsto".
Paso 5. Resultado
El final del proceso de cribado tiene tres resultados. Un pecho sano, lo que implica una nueva mamografía a los dos años. Un pecho con un tumor, que debe tratarse cuanto antes, y que tienen diferentes planteamientos, según el criterio clínico y estos casos no concluyentes, que es, según la Junta, donde ha estado el problema. "Lo normal es que el radiólogo aconseje una nueva prueba" y el circuito sería entonces, según las mareas, el siguiente: "Resultados de la mamografía al médico de familia, este remite a la paciente a la Unidad de Mama del hospital público de referencia. La paciente entra en un proceso oncológico, es decir, días de espera. Si el cribado detecta tumor incipiente y con diagnóstico precoz, la curación es la norma".
Este, en fin, ha sido el problema: mujeres que, debido a los retrasos, han desarrollado un tumor. Aún no se sabe cuántas. Las estadísticas, así lo recogen los protocolos publicados por el SAS, indican que en el 98% de esos diagnósticos no concluyentes no hay problema, lo detectado es benigno. Sin embargo, el 2% de 2.000 es 40. AMAMA no ha dado una cifra definitiva de afectadas, mientras su abogado estudia si presenta demanda y qué tipo de demanda presenta. AMAMA sí asegura que atiende a 200 personas. No está claro aún si todas ellas vienen del programa de cribados.



Comentarios de nuestros socias/os
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros socias y socios, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.