Tres personas murieron el miércoles en un incendio en el centro de Atenas provocado por manifestantes griegos durante una marcha de protesta contra las medidas de austeridad del Gobierno, informaron los bomberos.

"Hemos encontrado tres personas muertas en el edificio que está en llamas", agregó la brigada de bomberos en un comunicado.

Manifestantes griegos incendiaron un edificio comercial mientras decenas de miles de griegos marchaban hacia el Parlamento, poniendo a prueba la resolución del Gobierno para promulgar reducciones presupuestarias más profundas a cambio de miles de millones de euros de ayuda del FMI y la UE.

En el peor estallido de violencia desde que el Gobierno socialista llegó al poder en octubre, cientos de manifestantes apedrearon y lanzaron botellas a la policía, mientras incendiaban contenedores de basura e intentaban en repetidas ocasiones tomar por asalto el Parlamento.

Los incidentes ocurrieron poco antes de que los parlamentarios iniciaran un debate sobre las medidas de austeridad.

Las violentas protestas fueron repelidas por la policía antidisturbios, que lanzó bombas y gases lacrimógenos, haciendo que el humo invadiera algunas manzanas del centro de Atenas.

El primer ministro griego, Georgios Papandreu, dijo el miércoles que estaba profundamente conmocionado por la muerte de tres personas.

"Estamos profundamente conmocionados por la muerte injusta de tres empleados, nuestros conciudadanos, que fueron víctimas de una acción asesina", dijo Papandreu al Parlamento.

"A quienes están de luto les decimos que los culpables serán encontrados y llevados a la justicia", afirmó.

Agregó que las medidas de austeridad son necesarias para asegurar el futuro del país.

INCENDIOS

Jóvenes enmascarados lanzaron bombas incendiarias, rompieron las ventanas de tiendas mientras gritaban "asesinos" y "quemad el Parlamento", en un signo de la creciente indignación pública por los planes del Gobierno para recortar los sueldos y disminuir las pensiones.

Una gigantesca columna de humo gris oscuro se elevó sobre la céntrica avenida Stadiou en donde un edificio comercial de dos pisos, que alberga a una sucursal del banco Marfin, se estaba quemando. Otros dos edificios en el centro de la capital habían sido incendiados durante la protesta, informaron responsables.

La policía estimó la convocatoria de la marcha en cerca de 27.000 personas. Pero testigos oculares dijeron que participaron al menos 40.000, convirtiéndose en la mayor protesta desde que Grecia recibiera el primer impacto por la crisis crediticia a finales del año pasado.

Trabajadores del sector público y privado están realizando su tercera huelga conjunta este año. La medida ha hecho que los vuelos permanezcan en tierra, las tiendas cierren y el transporte público permanezca estancado.

El primer ministro Papandreu envió el martes al Parlamento un proyecto de austeridad que prevé recortes por 30.000 millones de euros mediante profundas reducciones de los sueldos y las pensiones y un aumento del impuesto sobre el valor añadido.