Lo que está en juego es el modelo de país'. Esta frase de un miembro del reducido círculo de dirigentes que participan en los maitines monclovitas expresa la esencia del planteamiento con que el Gobierno y el Grupo Parlamentario Socialista afrontarán la negociación de los apoyos necesarios para obtener la aprobación de los Presupuestos para 2010 y de la Ley de Economía Sostenible.

Ambos proyectos se tramitarán en paralelo una vez que sean aprobados por el Consejo de Ministros, el primero, el próximo día 26, y el segundo, si se cumple el calendario marcado por el presidente, el 16 de octubre.

A pesar de la unanimidad en la crítica con que la oposición volvió a castigar el miércoles a José Luis Rodríguez Zapatero, el Gobierno tiene ante así un abanico de posibles acuerdos que puede suponerle un apoyo más amplio que el conseguido el año pasado, cuando sacó adelante las cuentas del Estado sólo con el PNV y el BNG.

La rapidez de la ciaboga del PNV, cuyo portavoz, Josu Erkoreka, después de varios meses de oposición radical aseguró esta semana que la disposición de su partido al entendimiento no es 'un regate corto', ha abierto para el Gobierno 'una expectativa razonable' de acuerdo, en palabras de Zapatero.

El pacto con el PNV garantizaría al PSOE prácticamente la mayoría absoluta, ya que sus seis votos se sumarían a los tres que aportan como fijos Coalición Canaria y Unión del Pueblo Navarro, a cambio de ventajas para sus territorios.

Un eventual acuerdo con el PNV serviría de acicate para el polo de izquierdas

Pero, además, un eventual acuerdo con el PNV serviría, en opinión de los socialistas, de acicate para el polo de izquierdas, que suma siete votos, también suficientes por sí solos para proporcionar la mayoría absoluta.

Ante la extrema dureza con que el miércoles se pronunció el portavoz de ERC, Joan Ridao, miembros de la dirección socialista señalaron a Público que 'habrá que recordarles que, aunque hay un acuerdo político sobre la financiación autonómica, no tendrá vigencia hasta que el Parlamento apruebe la reforma de la ley orgánica (LOFCA)'. El Consejo de Ministros la aprobó el viernes para que su tramitación sea paralela a la de los proyectos económicos.

El PSOE recuerda a ERC que la financiación aún no está aprobada

La idea del 'modelo de país' que los socialistas pondrán sobre la mesa de negociación no sólo tiene que ver con la forma de afrontar la crisis, manteniendo o recortando la protección social. 'Tendrán que pensar que, si tumban los Presupuestos, tampoco se aprobará la reforma de la ley del aborto, ni la ley de libertad religiosa, ni otras cosas que importan a la gente y son sensibles para el electorado de izquierdas', advierten las fuentes consultadas.

El polo de izquierdas ha expresado su disposición a negociar, pero avisa de que, si da preferencia al entendimiento con el PNV, el Gobierno se enfrenta al riesgo de quedarse sin nada por quererlo todo.

'Zapatero dice que quiere pactar con nosotros, pero luego a quien llama a la Moncloa es a Rajoy', se quejan desde la izquierda del arco parlamentario. Pero Zapatero no quiere renunciar al máximo consenso posible, convencido de que 'no hay mejor mayoría que la que se construye cada día'.

PP, CiU y Rosa Díez presentarán enmiendas de totalidad.