El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, quiere aprovechar la presidencia de su país en el G-8 este año para llevar a cabo una reforma y empezar a tener más en cuenta a las grande economías emergentes.

En una entrevista publicada hoy por el diario francés Le Figaro, Berlusconi explica que 'Italia quiere que el G-8 sea más representativo y más concreto para ser más eficaz', para lo cual 'debe abrirse a las economías emergentes y dialogar con el mundo más pobre'.

Su propuesta es 'una asociación más estructurada y más estable del G-8 con los países del G-5 (China, India, Brasil, México y Suráfrica) así como con Egipto, como representante del mundo árabe, musulmán y africano'.

El jefe del Ejecutivo italiano comenta que durante su presidencia del grupo que reúne a los siete países más ricos y Rusia no hay una única prioridad sino muchas.

Cita desde 'la crisis financiera a las relaciones con la Federación Rusa, el conflicto en Oriente Próximo, la estabilización en Afganistán y en Irak, la escalada nuclear en Irán, la crisis de Darfur y el hambre, la pobreza y los cambios climáticos que ponen en peligro los Objetivos del Milenio'.

Berlusconi se niega a comparar al anterior presidente de Estados Unidos con el actual y dice que, para él, George W. Bush 'ha sido un amigo y un hombre al que he estimado. Tuvo que guiar a su país en uno de los momentos más trágicos de su historia'.

Respecto a Barack Obama señala que 'es un líder concreto y positivo que se prepara a fondo las cuestiones, que conoce bien los temas de política internacional, con el que se puede razonar'.

Preguntado por el papel de la Unión Europea en el conflicto árabe-israelí, defiende que 'Europa no se ha quedado inerte' y señala que en el G-8 se presentará 'un plan de apoyo a la economía de Cisjordania'.

Berlusconi descarta el diálogo con Hamás, 'una organización que fue integrada por Europa en la lista de organizaciones terroristas en la presidencia italiana de la Unión en 2003. ¿Cómo se podría negociar con los que querrían borrar del mapa a Israel?'.

Al mismo tiempo, asegura estar 'igualmente convencido de que las autoridades israelíes saben que un recurso excesivo a la fuerza que causa cientos de víctimas civiles es erróneo'.

La entrevista se hace pública el mismo día en que se celebra en Roma una cumbre franco-italiana en la que Berlusconi se entrevistará con el presidente francés, Nicolas Sarkozy, con quien firmará un acuerdo de cooperación en el campo de la energía nuclear.